Autor: Roberto Reik/ Revista Novo con información de Ansa.it
Débora Giorgi. Ministra de Industria de Argentina en reunión de OMPI.
Cree que aumentar la protección de las patentes traerá mayores inversiones de laboratorios extranjeros. Foto : archivo.
Cree que aumentar la protección de las patentes traerá mayores inversiones de laboratorios extranjeros. Foto : archivo.
Buenos Aires.- Los laboratorios farmaceúticos latinoamericanos denunciaron una nueva ofensiva de Estados Unidos por instalar un monopolio de mercado en la región que provocaría el "caos" para la seguridad social, al vincular las licencias obligatorias y los genéricos con la falsificación de medicamentos.
La Asociación Latinoamericana de Industria Farmacéuticas (Alifar) advirtió en un documento que Estados Unidos intentará imponer la supuesta "falta de protección adecuada" de las patentes en la región, durante la 18 sesión del Comité sobre el Derecho de Patentes a celebrarse en Ginebra, entre el 21 al 25 de mayo, convocado por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI).
Alifar cuestionó "la pretensión de
Estados Unidos de vincular la cuestión del comercio de medicamentos
falsificados y de calidad inferior a las normas sanitarias con la
observancia de Propiedad Intelectual".
Además, los incentivos a la investigación que proporcionan los derechos de propiedad intelectual según las multinacionales, "han sido claramente insuficientes para tratar una gran varidad de enfermedades que afectan a las poblaciones de los países en vías de desarrollo".
Tal situación "no hace sino demostrar que las políticas de salud pública y de innovación y desarrollo de los diferentes países miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) no pueden limitarse a proponer aumentar el rigor del sistema de patentes" y esperar que esos cambios "produzcan automáticamente mejoras en la salud de la población", señaló Alifar, cuya secretaría funciona en Buenos Aires. Por el contrario, los países en desarrollo deben "gozar de los mayores niveles posibles de libertad política para la configuración de sus sistemas de propiedad intelectual", afirmó la entidad, que agrupa a quince países latinoamericanos y realizará su próxima asamblea anual del 10 al 14 de mayo en la ciudad de México.
Datos de la Ministra de Industria argentina
El año pasado Débora Giorgi, había afirmado que el mercado interno de medicamentos es de US$ 4.300 millones con un
déficit de 1.300 millones que, según sus proyecciones de continuar así, se elevaría en 2020 a US$ 2.800 millones.
Giorgi dijo que hay un estado presente que está torciendo esa "tendencia
deficitaria".
-Advirtió entonces que los laboratorios internacionales bajaron su producción
en Argentina y que ahora, la fabricación local será condición de acceso a
nuestro mercado.
Giorgi, aseguró además que "las patentes de propiedad intelectual se habían triplicado desde el 2003 a la fecha, de la mano del crecimiento económico, en especial del sector industrial, ya que en los últimos años han surgido nuevos sectores de alto dinamismo basados en esta nueva forma de agregar valor a través de la innovación y la creatividad". La Ministra Giorgi había dado apertura de la conferencia regional de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), en el Hotel Intersur del porteño barrio de la Recoleta.
Sin embargo, las presiones denunciadas por ALIFAR se relacionan a modificaciones a introducirse en leyes argentinas de patentes para proteger a laboratorios extranjeros cuyas patentes de medicamentos representan más del 95% del total de patentes medicinales presentadas en la Oficina de patentes y marcas de Argentina (INPI), ese déficit dificilmente pueda a revertirse, afirmaron representantes de laboratorios nacionales.
La ministra de Industria, Débora Giorgi, aseguró entonces que Argentina en 2020 producirá 1.350 millones de unidades de medicamentos (contra las menos de 500 millones actuales), generará 40.000 nuevos empleos en el sector y revertirá la balanza comercial para llegar a un superávit de 1.500 millones de dólares.
Giorgi explicó que para alcanzar esos objetivos “estamos instrumentando medidas que permitirán revertir el déficit creciente del sector –que hoy es de 1.300 millones de dólares entre principios activos y medicamentos- a través del incremento de la producción nacional” y advirtió que “impulsamos la producción por parte de los laboratorios multinacionales en la Argentina como condición de acceso a su mercado”.
La ministra aseguró que “sin un Estado presente, en 2020 el sector tendría un déficit de 2.800 millones de dólares, por lo que las políticas públicas activas apuntan a torcer esa tendencia que erosiona inexorablemente la competitividad de la industria”.
“El Estado construyó un mercado interno como el de los medicamentos de 4.400 millones de dólares, por lo que ese mismo Estado va a exigir producción en territorio”, dijo Giorgi sugiriendo un cambio en la ley de patentes argentina, ya modificada en 1995.
La Ministra había anunciado que, entre otras cosas, se fortalecerá la vinculación internacional de las pymes del sector y se financiará su reconversión tecnológica, se habilitarán estudios y ensayos para la autorización de medicamentos genéricos basados en medicamentos patentados, antes de que la patente expire y se impulsará el desarrollo de productos dirigidos al mercado regional, entre otras medidas.
EL peligro que ve ALIFAR es que la autorización mencionada por la ministra sería nada más y nada menos que el denominada "ensayo de bioequivalencia" requerido por los laboratorios de Estados Unidos y Europa en los TLC, que extenderían la vigencia de la protección de las patentes por al menos 5 años más, de los 20 actuales.
Por su parte, Alifar y agentes de propiedad industrial locales, consideran que por sugerencias del presidente del INPI, Mario Aramburu, la Ministra de Industria estaría de acuerdo en introducir cambios a la ley de patentes alineados con la propuesta de la oficina de marcas y patentes de los Estados Unidos (USPTO), en la próxima reunión del consejo de derechos de patente de la OMPI, en Ginebra, Suiza.
Giorgi, aseguró además que "las patentes de propiedad intelectual se habían triplicado desde el 2003 a la fecha, de la mano del crecimiento económico, en especial del sector industrial, ya que en los últimos años han surgido nuevos sectores de alto dinamismo basados en esta nueva forma de agregar valor a través de la innovación y la creatividad". La Ministra Giorgi había dado apertura de la conferencia regional de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), en el Hotel Intersur del porteño barrio de la Recoleta.
Sin embargo, las presiones denunciadas por ALIFAR se relacionan a modificaciones a introducirse en leyes argentinas de patentes para proteger a laboratorios extranjeros cuyas patentes de medicamentos representan más del 95% del total de patentes medicinales presentadas en la Oficina de patentes y marcas de Argentina (INPI), ese déficit dificilmente pueda a revertirse, afirmaron representantes de laboratorios nacionales.
La ministra de Industria, Débora Giorgi, aseguró entonces que Argentina en 2020 producirá 1.350 millones de unidades de medicamentos (contra las menos de 500 millones actuales), generará 40.000 nuevos empleos en el sector y revertirá la balanza comercial para llegar a un superávit de 1.500 millones de dólares.
Giorgi explicó que para alcanzar esos objetivos “estamos instrumentando medidas que permitirán revertir el déficit creciente del sector –que hoy es de 1.300 millones de dólares entre principios activos y medicamentos- a través del incremento de la producción nacional” y advirtió que “impulsamos la producción por parte de los laboratorios multinacionales en la Argentina como condición de acceso a su mercado”.
La ministra aseguró que “sin un Estado presente, en 2020 el sector tendría un déficit de 2.800 millones de dólares, por lo que las políticas públicas activas apuntan a torcer esa tendencia que erosiona inexorablemente la competitividad de la industria”.
“El Estado construyó un mercado interno como el de los medicamentos de 4.400 millones de dólares, por lo que ese mismo Estado va a exigir producción en territorio”, dijo Giorgi sugiriendo un cambio en la ley de patentes argentina, ya modificada en 1995.
La Ministra había anunciado que, entre otras cosas, se fortalecerá la vinculación internacional de las pymes del sector y se financiará su reconversión tecnológica, se habilitarán estudios y ensayos para la autorización de medicamentos genéricos basados en medicamentos patentados, antes de que la patente expire y se impulsará el desarrollo de productos dirigidos al mercado regional, entre otras medidas.
EL peligro que ve ALIFAR es que la autorización mencionada por la ministra sería nada más y nada menos que el denominada "ensayo de bioequivalencia" requerido por los laboratorios de Estados Unidos y Europa en los TLC, que extenderían la vigencia de la protección de las patentes por al menos 5 años más, de los 20 actuales.
Por su parte, Alifar y agentes de propiedad industrial locales, consideran que por sugerencias del presidente del INPI, Mario Aramburu, la Ministra de Industria estaría de acuerdo en introducir cambios a la ley de patentes alineados con la propuesta de la oficina de marcas y patentes de los Estados Unidos (USPTO), en la próxima reunión del consejo de derechos de patente de la OMPI, en Ginebra, Suiza.