La Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf)
anticipó un duro golpe contra la economía de las familias en el país y
un impacto de hasta 15 mil millones de pesos en los próximos cinco años
para las instituciones de salud, tras la conclusión del Acuerdo Estados
Unidos-México-Canadá (USMCA, por sus siglas en inglés).
“Pensamos que sí fue moneda de cambio. El ampliar la protección de
datos va a representar un sobreprecio, sobre todo para productos
biotecnológicos, básicamente oncológicos (para cáncer) y retrovirales
(contra VIH)”, dijo Juan de Villafranca, director ejecutivo de Amelaf.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el representante de 25 laboratorios
con 32 plantas y 30 mil colaboradores a escala nacional pidió la
intervención del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para
evitar el impacto a la población y a las empresas mexicanas productoras
de medicamentos.
“Es un punto que se debe ver con mucho cuidado, una vez que se firme
pasa a ratificación del Senado y éste lo debe ver con mucho cuidado, si
vienen 10 años de protección, también debemos de ver el fraseo. No hay
claridad desde el punto de vista legal en México respecto del alcance y
cómo queda el tema de protección de datos.
“Amelaf tiene confianza en el apoyo que el próximo gobierno quiere
dar a la población con medicamentos a buen precio y hacia la industria
nacional, habrá que ver cómo se pueda subsanar esto. En un momento dado,
si nos vamos al extremo con 10 años de protección y condiciones
rigurosas, tendrá que ser creativo el próximo gobierno”, apuntó.
Villafranca, quien fuera embajador de México en Singapur y director
de patentes, marcas y desarrollo tecnológico en el Instituto Mexicano de
la Propiedad Industrial (IMPI), pidió reglas claras en el tema de
salud, así como una revisión a fondo y plantear escenarios sobre el
impacto a la sociedad mexicana.
“Es un impacto duro porque le costará al sector salud un sobreprecio
de 13 mil a 15 mil millones de pesos, y con ese dinero se pueden hacer
muchas cosas. Son recursos que se requieren, no hay nada más preciado
que la salud, si no hay salud, el país no puede avanzar”, añadió.
Para Amelaf, los mexicanos deben tener acceso a medicamentos
genéricos con facilidad y las patentes de 20 años con las que cuentan
los medicamentos innovadores es un tiempo suficiente para lograr
ganancias importantes; sin embargo, las grandes empresas de patentes han
encontrado mecanismos para bloquear la llegada de genéricos.
La Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica
(AMIIF), que representa a multinacionales extranjeras, dijo que el
acuerdo clarifica la figura de protección de datos y confirmó que la
temporalidad de la vigencia es de 10 años para medicamentos
biotecnológicos.