Agencia dpa / (Europa Press) –Ayer se cumplieron 143 años de
que Alexander Graham Bell patentase el teléfono en 1876, referido como
un aparato que transmitía sonidos por un cable a través de señales
eléctricas.
Durante mucho tiempo Bell fue considerado el inventor
del teléfono, junto con Elisha Gray. Sin embargo, el investigador
escocés no fue el inventor de este aparato, sino solamente el primero en
patentarlo.
El 11 de junio de 2002 el Congreso de Estados Unidos
aprobó la resolución 269, por la que se reconocía que el inventor del
teléfono había sido Antonio Meucci, que lo llamó teletrófono, y no Bell.
En 1871 Meucci solo pudo, por dificultades económicas, presentar una
breve descripción de su invento, pero no formalizar la patente ante la
Oficina de Patentes de Estados Unidos.
Tras patentarlo, Bell
comenzó una serie de demostraciones y conferencias públicas para
introducir su teléfono entre la comunidad científica así como al público
en general. Su demostración en la exposición del centenario en
Filadelfia de 1876, hizo del teléfono la noticia de titulares alrededor
del mundo, según Wikipedia.
Influyentes visitantes como el
Emperador Pedro II de Brasil pudieron observar el invento. Hasta la
Reina Victoria pidió una audiencia privada en el Castillo de Osborne, y
calificó la demostración de “extraordinaria”. El entusiasmo que rodeaba a
las demostraciones en público de Bell ayudó a la aceptación del
revolucionario dispositivo.
La Bell Telephone Company fue creada
en 1877 y para 1886, más de 150 mil personas en los Estados Unidos
poseían teléfonos. Los ingenieros de la compañía de Bell llevaron a cabo
numerosas mejoras al teléfono, que se convirtió en uno de los productos
más exitosos. En 1879, la compañía de Bell adquirió las patentes de
Edison para el micrófono de carbón de la Western Union. Esto hizo el
teléfono práctico para las largas distancias, al contrario del
transmisor accionado por voz de Bell que requería que los usuarios
gritaran en él para que se oyera en el teléfono de recepción, aún en las
distancias cortas.
El 25 de enero de 1915 Alexander Graham Bell
envió la primera llamada telefónica transcontinental, desde el 15 de Day
Street en la ciudad de Nueva York, que fue recibida por Thomas Watson
en la 333 de Grant Avenue en San Francisco, California.