AFP Factual.-Múltiples publicaciones en redes sociales aseguran que el coronavirus que surgió a fines de 2019 en China fue creado y patentado en Estados Unidos, e incluyen información de patentes a modo de prueba. Sin embargo, esto es falso: aunque dichas patentes existen, no corresponden al nuevo virus.
Las entradas circulan al menos desde el 22 de enero de 2019 en Facebook (1, 2, 3, 4 y 5) y en Twitter (1 y 2). “Coronavirus.
Virus creado por inventores estadounidenses, considerada arma biológica
de los EE.UU. También existen patentes de Bill Gates en 2015-2018. Y le
pertenece al gobierno de los Estados Unidos”, se lee en una de ellas, que incluye enlaces a patentes de coronavirus y de virus SRAS.
Captura de pantalla realizada el 28 de enero de 2020 de una de las publicaciones en Facebook
Algunas de las publicaciones aseguran que Bill Gates está detrás de la creación del virus, otros lo adjudican a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC),
la agencia gubernamental sanitaria de Estados Unidos. Pero en todos los
casos, las publicaciones presuponen que existe un solo coronavirus,
cuando en realidad se trata de una familia de virus que afectan a humanos y animales y que pueden causar neumonía, falla renal e inclusive la muerte.
Una de las patentes que las entradas incluyen a modo de “evidencia” es la US7220852B1,
que corresponde a la secuencia del genoma del coronavirus que surgió en
la provincia china de Guangdong en 2002-2003, conocido como SRAS (SRAS-CoV).
Ese virus provocó una epidemia de Síndrome Respiratorio Agudo y Severo
que afectó a más de 8.000 personas en 30 países y mató a 900, de acuerdo
con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Captura de pantalla realizada el 28 de enero de 2020 de una patente publicada en Google Patents
“Esta es una patente que cubre la secuencia del SRAS-CoV que difiere en un 25% del CoV de Wuhan”, explicó en un correo electrónico a la AFP Ralph Baric, especialista en coronavirus de la Escuela Gillings de Salud Pública Global, de la Universidad de Carolina del Norte.
El 5 de enero pasado, autoridades chinas señalaron
que la epidemia de neumonía que empezó en Wuhan, conocido oficialmente
como Nuevo Coronavirus 2019 (2019-nCoV), no era el virus SRAS.
La secuencia del genoma del nuevo coronavirus fue publicada en
enero de 2020 por el Centro Clínico de Salud Pública y Escuela de Salud
Pública de Shanghái en GenBank, una base de datos de acceso abierto
para secuencias de nucléotidos.
Otra de las patentes mencionadas en las publicaciones es la US10130701B2. Pero ésta en realidad corresponde a una forma atenuada de otro coronavirus, que “pueden ser utilizados como vacuna para tratar y/o prevenir enfermedades como bronquitis infecciosas”, según explica el sitio web Google Patents.
Captura de pantalla realizada el 28 de enero de 2020 de una de las patentes en Google Patents
Consultado por AFP Factual, Juan Carballeda, investigador del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) y miembro de la Asociación Argentina de Virología (SAV), explicó: “Esta
patente es de una cepa atenuada de un coronavirus aviar, el responsable
de la bronquitis aviar. En la patente muestran que les hacen ciertas
mutaciones para lograr su atenuación. La idea es tener una cepa que no
cause enfermedad en las aves pero que, dado su parecido con el virus que
sí causa la enfermedad, se genere inmunidad a largo plazo para
enfrentar al virus”.
Carballeda aseguró que al tratarse de un coronavirus aviar, “no es posible que sea el mismo virus [2019-nCoV], ni que el virus que actualmente circula provenga de esa cepa” y
explicó que la técnica de mutar virus para generar cepas atenuadas es
una estrategia para desarrollar vacunas que se usa ampliamente.
Aún
no existe vacuna para el nuevo coronavirus que provocó una epidemia
en China. Científicos en Estados Unidos están dando los primeros pasos para desarrollarla y advierten que el proceso será “largo e incierto”.
La
enfermedad respiratoria causada por este nuevo virus ha causado más de
100 muertos y llevado a que 41 millones de personas fueran puestas en cuarentena en China. El 2019-nCoV, con casi 6.000 afectados, ha
despertado alarma dada su similitud con la epidemia de SRAS de
2002-2003. El 29 de enero de 2020, la OMS urgió a los gobiernos del
mundo a actuar y convocó a una nueva reunión de urgencia.
En
conclusión, es falso que las patentes mencionadas en las publicaciones
virales prueben que el nuevo coronavirus fue creado en Estados Unidos.
Una de las dos patentes que las entradas incluyen a modo de “prueba”
corresponde a una que cubre la secuencia del SRAS-CoV que provocó una
epidemia en 2002-2003, mientras que la segunda es de una cepa atenuada
de un coronavirus aviar. En ninguno de los dos casos responden al
2019-nCoV.