The Guardian
Estados Unidos y Alemania están en desacuerdo sobre el tema de las exenciones para las patentes de las vacunas Covid-19, ya que Berlín argumentó que una exención no aumentaría la producción e inhibiría la investigación futura del sector privado.
El desacuerdo es la primera gran brecha entre las dos potencias económicas desde que Joe Biden asumió el cargo y amenaza con bloquear las discusiones en la Organización Mundial del Comercio (OMC) y agriar las relaciones dentro del grupo G7 de las principales democracias industrializadas.
Cualquier decisión de la OMC sobre una exención tendría que ser por consenso, por lo que la oposición de Alemania es un obstáculo importante para la suspensión de los derechos de propiedad intelectual sobre las vacunas.
El anuncio del gobierno de Biden el miércoles de que respaldaría una exención sobre las patentes de vacunas fue recibido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un paso hacia una mayor equidad global en un momento en que los países pobres tienen poco acceso a las vacunas y el sur de Asia se ha visto afectado por un brote devastador. India representó el 46% de los nuevos casos de Covid-19 registrados en todo el mundo durante la semana pasada, y hay indicios de que la ola se está extendiendo a Nepal, Sri Lanka y otros estados vecinos.
Pero el gobierno de Angela Merkel se pronunció en contra de una exención el jueves.
“La sugerencia de Estados Unidos para el levantamiento de la protección de patentes para las vacunas Covid-19 tiene implicaciones significativas para la producción de vacunas en su conjunto”, dijo una portavoz del gobierno.
“Los factores limitantes en la producción de vacunas son las capacidades de producción y los estándares de alta calidad y no las patentes”, agregó, argumentando que las empresas ya estaban trabajando con socios para impulsar la capacidad de fabricación.
“La protección de la propiedad intelectual es una fuente de innovación y debe seguir siéndolo en el futuro”.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Tony Blinken, dijo que la exención de patente era solo uno de los diversos medios que la administración estaba buscando para intensificar la lucha para contener la pandemia.
“Lo principal es que tenemos que acelerar esto”, dijo Blinken a MSNBC durante una visita a Ucrania. “En la trayectoria actual, si no hacemos más, si el mundo entero no hace más, el mundo no será vacunado hasta el 2024. Podemos acelerar esto y lograrlo, creo, en mucho menor tiempo. Y si lo hacemos, todos estaremos mejor “.
Las compañías farmacéuticas reaccionaron con enojo a la decisión de Estados Unidos y las acciones de los fabricantes de vacunas chinos y estadounidenses cayeron . Algunos países también expresaron su asombro en privado, con un diplomático acusando a Estados Unidos de grandilocuencia al ofrecer soluciones simplistas agradables a la multitud para problemas a largo plazo.
En tiempos normales, las patentes preservan las ganancias de las empresas multinacionales que fabrican medicamentos y vacunas, por lo que es ilegal que los rivales produzcan versiones baratas de imitación hasta por 20 años. Pero en medio de una pandemia en la que la OMS dice que nadie está a salvo hasta que todos estén a salvo, los activistas dicen que hay un poderoso argumento moral para deshacerse de ellos.
El anuncio de Biden sobre exenciones ha dividido a la Unión Europea. Emmanuel Macron dijo que estaba “absolutamente a favor” de la medida, lo que marcó un cambio para Francia, que anteriormente había argumentado que una exención de patente desalentaría la innovación.
La jefa de la comisión europea, Ursula von der Leyen, dijo que el bloque estaba abierto al debate. Señaló que el esfuerzo de vacunación de la UE se estaba acelerando, con 30 europeos vacunados cada segundo, mientras que exportaban más de 200 millones de dosis. Von der Leyen dijo que Europa “también está dispuesta a discutir cualquier propuesta que aborde la crisis de una manera eficaz y pragmática”.
“Es por eso que estamos listos para discutir cómo la propuesta de Estados Unidos de una exención sobre la protección de la propiedad intelectual para las vacunas Covid-19 podría ayudar a lograr ese objetivo”, dijo.
La jefa del panel que revisa el manejo de la OMS de la pandemia, Helen Clark, la ex primera ministra de Nueva Zelanda, llamó anteriormente a los países que han obstruido la suspensión temporal de los derechos de propiedad intelectual para las vacunas Covid-19, como el Reino Unido, Suiza y Estados de la UE, para seguir el ejemplo de Estados Unidos y respaldar la iniciativa.
Ella describió el anuncio de la administración de Biden como un cambio de juego y dijo que las compañías farmacéuticas que habían recibido miles de millones en dinero público ahora necesitan difundir conocimientos para aumentar la producción de vacunas.
“Cuando Estados Unidos se mueve, es una señal tan poderosa”, dijo Clark a la BBC. “Uno esperaría que el Reino Unido, la UE y Suiza y otros que han estado obstruyendo la discusión sobre la exención necesiten decir: ‘Sí, estamos preparados para negociar’”.
El duque y la duquesa de Sussex entraron al debate el jueves, pidiendo a los fabricantes de vacunas de Covid que actúen con “responsabilidad y liderazgo” y aumenten la asignación de dosis distribuidas a las partes más pobres del mundo.
Harry y Meghan han escrito una carta abierta a los directores ejecutivos de compañías farmacéuticas como Pfizer, Moderna y AstraZeneca instándoles a redoblar su apoyo al programa Covax patrocinado por la ONU.
