Decenas de países han revisado una propuesta ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) sobre exenciones de patentes para equipamientos médicos imprescindibles para combatir el covid, insistiendo en que deben ampliarse más allá de las vacunas, destacaron oenegés este sábado.
Más de 60 países presentaron una revisión de su texto ante la OMC sobre cómo lograr exenciones sobre la protección de propiedad intelectual para las vacunas anticovid y otros equipamientos médicos mientras la pandemia continúe, según las oenegés Médicos Sin Fronteras (MSF) y Knowledge Ecology International (KEI).
KEI publicó lo que afirmó es el texto revisado, en el que se presiona para que estas exenciones sean amplias y duraderas.
La OMC no confirmó por el momento la autenticidad de tal documento.
Este texto señala que las exenciones deben cubrir todos los equipamientos médicos de "prevención, tratamiento y contención" necesarios para combatir el covid.
Además de las vacunas, deben incluirse los tratamientos, diagnósticos, aparatos médicos y equipos de protección, así como los materiales necesarios para fabricarlos, indica.
También destaca que las exenciones deberían durar "por lo menos tres años" a partir de la fecha de entrada en vigencia, periodo tras el cual el Consejo General de la OMC determinará si deben levantarse o prolongarse.
- "Aumento aterrador" -
"Nos complace comprobar que aquellos gobiernos que patrocinan la propuesta de exenciones a la propiedad intelectual, reafirman que éstas tienen por objetivo eliminar las barreras de monopolio para todos los equipamientos médicos (...) necesarias para luchar contra la pandemia" de covid, señaló en un comunicado la directora de MSF para el sur de Asia, Leena Manghaney.
"Con un aumento aterrador de contagios y muertes en los países en desarrollo, y con tratamientos potencialmente prometedores en progreso, es clave que los gobiernos cuenten con toda la flexibilidad a su disposición para hacer frente a la pandemia", añadió.
Desde octubre pasado, la OMC se enfrenta a llamados de India y Sudáfrica para la eliminación temporal de estas protecciones a la propiedad intelectual de estos materiales, que, según sus defensores, impulsaría la producción en países en desarrollo y superaría la dramática desigualdad en el acceso a los bienes.
Esta idea chocó durante mucho tiempo con una feroz oposición de los gigantes de la industria farmacéutica y sus países de origen, que aseveraron que las patentes no eran el principal obstáculo para aumentar la producción, advirtiendo que esta medida podría obstruir la innovación.
Esta posición pareció cambiar a comienzos de mes, cuando Washington manifestó su apoyo a una exención de patentes para las vacunas a nivel mundial. Otros países, otrora reticentes, expresaron estar abiertos a discutir la cuestión.
El Parlamento Europeo votó esta semana por un pequeño margen instar a Bruselas a respaldar esta propuesta.
No obstante, los observadores dicen que las ambiciones de exenciones parecen diferir de manera significativa entre los partidarios de siempre y los que ahora se aproximan a esta idea, que parecen centrarse concretamente en las vacunas.
No está muy claro que los países se pongan de acuerdo, sin embargo, con la pandemia que se ha cobrado las vidas de más de 3,4 millones de personas aún en pleno apogeo, existe una fuerte presión para que lo hagan.
Con esta revisión sobre la mesa, MSF solicitó que "los gobiernos avancen inmediatamente hacia negociaciones basadas en textos", subrayando que no hay tiempo que perder.
A la luz del ritmo de la OMC, habitualmente glacial, para la toma de decisiones, con acuerdos que requieren el consenso de los 164 Estados miembros, esto podría llevar tiempo.
De acuerdo a MSF, más de 100 países apoyan actualmente la propuesta, incluidos China y Rusia.
Un total de 62 países son por el momento copatrocinadores oficiales de esta propuesta. Indonesia, Fiyi, Vanuatu y Namibia se unieron en las últimas semanas.