EE UU insiste en que Argentina ingrese a
tratado internacional de Patentes PCT y cuestiona política de medicamentos
Autor: Fernando Barrios Quintana
17 de julio de 2012.- Según los cables de
Wikileaks filtrados en los últimos tiempos en la página de Julian Assange sobre
los informes enviados desde la Embajada de Estados Unidos a Washington se
refieren a la Oficina nacional de propiedad industrial (INPI). Los cables
señalan una queja frecuente de las compañías farmacéuticas de Estados Unidos en
relación a que en la Argentina continua no habiendo ningún vínculo normativo
entre el INPI y la Administración Nacional de Alimentos, Medicamentos y
tecnologías (ANMAT).
El cable remarca que mientras que esa vinculación
no se solicite expresamente por el Acuerdo sobre los ADPIC, su ausencia en la
Argentina permite a la ANMAT conceder la autorización local a fabricantes de
productos farmacéuticos para fabricar y vender productos que ya han sido
patentados o cuya patente ha sido solicitada.
La Embajada y las empresas farmacéuticas
multinacionales han instado al gobierno argentino para establecer un vínculo
entre la ANMAT y el INPI que impida que continúe la ANMAT autorizando productos
farmacéuticos locales cuya patente se haya concedido o este pendiente de
hacerlo.
Según la comunicación 07BUENOSAIRES335 había
indicios durante el año 2005 de una relación de cooperación entre el INPI y la
ANMAT, pero la Embajada no tiene constancia de que dicha cooperación se ha
desarrollado. (Nota: el jefe del INPI dijo al Encargado de Negocios (Econoff)
que a finales de 2006 el INPI y la ANMAT se encontraban en una estrecha
comunicación, sin embargo el jefe de la ANMAT dijo que no hay comunicación
alguna entre los organismos y que la autoridad competente para tomar decisiones
sobre las patentes potencialmente conflictivas era el sistema judicial, no
ANMAT.
Otro tema en que la embajada de Estados Unidos
insiste es que la Argentina todavía tiene que convertirse en un Estado
contratante (OMPI) del Tratado de Cooperación en Materia de Patentes
administrado por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual., pues
según los Estados Unidos se reduciría el Backlog o acumulación de solicitudes
pendientes del INPI la solicitud de patente.
El más importante problema sin resolver que queda
patente farmacéutica se refiere a la tutela judicial efectiva de los datos
confidenciales y propietarios desarrollados por las compañías farmacéuticas
SIPDIS para demostrar la eficacia y seguridad de nuevos medicamentos (es decir,
"la protección de datos"). EE.UU. creen que esto es un tema crítico y
Argentina y los EE.UU. han puesto de acuerdo en dejar este asunto en el
mecanismo de solución de diferencias de la OMC para la acción futura. Las
políticas de Goa han llevado basadas en la investigación de las compañías
farmacéuticas se quejan de que las autoridades sanitarias argentinas
reguladoras (ANMAT en particular, la Administración Nacional de Medicamentos,
Alimentos y Tecnología Médica, el equivalente a la FDA) se basan en los datos
de forma inapropiada desarrollados por empresas de investigación y presentados
por empresas que no participaron en la investigación como a la ANMAT para
obtener la aprobación de comercialización de copias no autorizadas de
medicamentos innovadores. Según CAEME, ANMAT interpreta la divulgación pública
de datos parciales como un indicador de que los datos deben ser considerados
como de dominio público.