A las 12 en punto, al grito de «manos arriba, esto es un atraco», los funcionarios irrumpen en los tres carriles de la Avenida Castellana en cada dirección.
Durante los últimos días, el número de grupos de empleados que interrumpen el tráfico durante unos minutos para protestar por la política de hachazos dde Mariano Rajoy se ha multiplicado: “La gente estaba dormida, pero cada vez sale más a la calle. Y esto es solo el principio», asegura María José Torres, de 38 años y empleada de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).
La oficina se encuentra bajo una profunda crisis producto de los recortes salariales realizados por el gobierno del PP y que afectan a los profesionales que se desempeñan en propiedad industrial.
«Te van minando sicológicamente. Al final, llegará 2020 y cobraremos menos que a mediados de los 90», asegura Francisco González, de la misma oficina que Torres.
El gobierno y sectores de la sociedad cuestionaron a estos funcionarios del Estado «Desde ciertos sectores nos han pintado como si fuéramos vagos, como si no hiciésemos nada. Pero se olvidan que, además de en oficinas, los funcionarios también somos médicos o profesores», se defienden.
“no tenemos la culpa que la mayor
parte de las marcas y las patentes provengan de Alemania, Estados
Unidos, Francia e Inglaterra”, el sistema de patentes no lo
inventamos nosotros”, dijo un examinador de patentes de la OEPM