guiaongs.org.- Anticancerígenos o tratamientos para la Hepatitis C solo son
accesibles para una minoría de las personas, pues se trata de
medicamentos con un precio muy alto. Esto es lo que denuncia Médicos del Mundo con su campaña ‘El precio de la vida’,
una iniciativa que tiene como objetivo unir a la ciudadanía para que
reclame al gobierno que medicinas fundamentales para la curación de
muchísimos enfermos estén a su alcance y se puedan salvar vidas.
La organización denuncia que el coste de estos artículos lleva años
aumentado y que el gobierno, con negociaciones con las farmacéuticas,
pueden conseguir que se bajen los precios y sean más accesibles a un
mayor número de personas. La tarifa la determinan los laboratorios en
función de la capacidad que tienen los Estados de pagar el acceso a los
tratamientos. Es decir, a mayor calidad de vida mucho más altos los
precios de estos medicamentos. Pese a que las farmacéuticas achacan esas
tarificaciones a lo que cuesta la investigación y el desarrollo de
fármacos, la realidad es otra. Normalmente, denuncian en Médicos del
Mundo, se sobreestiman esas cifras pues los importes reales son
secretos.
La mayoría de los fármacos se desarrollan en universidades públicas,
en los laboratorios. Las empresas del sector adquiere los
descubrimientos más interesantes. Estas nunca comunican cuanto cuesta
realmente fabricar estos artículos y el tema es especialmente
preocupante porque el sistema sanitario español no podrá asumir esos
costes a medio y largo plazo.
Podría pensarse en fabricarse genéricos, algo así como las marcas
blancas del sector farmacéutico. El problema está en las patentes, que
tienen una validez mínima de 20 años y durante ese tiempo no se puede
generar ningún artículo a bajo precio. Esto es algo que se estableció en
la década de los 90 en España, por lo que probablemente se podría dar
un paso hacia atrás.
Las soluciones que se plantean desde Médicos del mundo para ‘El
precio de la vida’ pasan por pedir al estado que proteja a la población e
intervenga para que los precios de medicamentos esenciales sea más
bajo. También se pide transparencia en materia de investigación y
desarrollo de fármacos y un modelo alternativo al de las patentes para
poder financiar más estudios.