eldiariodemadryn.com.- La Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia le ordenó a
Petroil, empresa de servicios petroleros, que deje de usar un equipo de
medición, el cual, según se comprobó, era copia de un invento ajeno que
ya estaba patentado.
Así, los jueces Javier Leal de Ibarra, Hebe Corchuelo de Huberman y Aldo
Suárez resolvieron una demanda que se remonta a noviembre de 2009,
cuando Carlos Alberto Campanello denunció que la empresa había
falsificado y estaba usando instrumental petrolero que en realidad era
una creación suya. Según la demanda, la empresa lo usaba por su cuenta o
contratada por terceros en los yacimientos.
El instrumento en cuestión permite testear y controlar los anclajes
contraviento de torres petrolíferas determinando su estado, solidez y
condiciones de seguridad operativas. Campanello obtuvo la patente en
octubre de 2008 otorgada por el Instituto Nacional de la Propiedad
Intelectual (INPI).
El equipo tiene un uso intensivo ya que en muchas regiones del país se
usan las torres con vientos o fijaciones mediante cables de alta
seguridad anclados al suelo, y cumple con las más altas especificaciones
en seguridad, ajustada a los procedimientos del Instituto Argentino de
Normalización y Certificación (IRAM).
Expusieron como propio el producto
El inventor se enteró de que Petroil había comenzado a ofrecer el
servicio de testeo a empresas a través del uso de un equipo idéntico al
suyo. Envió cartas documento tanto a la firma como a las contratantes
del servicio y no le respondieron.
No podía actuar judicialmente porque la ley de patentes le exigía tener el título de su invento, cosa que obtuvo tras un complejo examen técnico. “Esto lo condujo a tener que observar cómo terceros sacaron ventaja de su invención, encontrándose en condiciones de hacer valer sus derechos recién al obtener el título”, dijeron los jueces, según el fallo.
Campanello se quejó de que las empresas estaban usando una copia para no pagarle el canon que le corresponde y para no contratar sus servicios. En la causa pidió una pericia: el oficial de Justicia interviniente y el perito ingeniero designado constataron que en las instalaciones de Petroil, pese a las advertencias por cartas documento, existían unidades con idénticas características técnicas a las del equipo de su autoría.
El demandante insistió con que Petroil, aún luego de concedida la patente, intentó disfrazar los equipos falsificados pidiendo la misma patente y “rodeándolos de un aura de legalidad” ante la Administración Nacional de Patentes. También, se quejó por la competencia desleal e incluso denunció que en la Expo Pymes 2010, Petroil presentó y expuso como propio el servicio en discusión. La empresa hasta publicó con fotografía en un diario de amplia circulación, aduciendo que había obtenido el patentamiento del equipo, pero tras una intimación, debió hacer una fe de erratas.
No podía actuar judicialmente porque la ley de patentes le exigía tener el título de su invento, cosa que obtuvo tras un complejo examen técnico. “Esto lo condujo a tener que observar cómo terceros sacaron ventaja de su invención, encontrándose en condiciones de hacer valer sus derechos recién al obtener el título”, dijeron los jueces, según el fallo.
Campanello se quejó de que las empresas estaban usando una copia para no pagarle el canon que le corresponde y para no contratar sus servicios. En la causa pidió una pericia: el oficial de Justicia interviniente y el perito ingeniero designado constataron que en las instalaciones de Petroil, pese a las advertencias por cartas documento, existían unidades con idénticas características técnicas a las del equipo de su autoría.
El demandante insistió con que Petroil, aún luego de concedida la patente, intentó disfrazar los equipos falsificados pidiendo la misma patente y “rodeándolos de un aura de legalidad” ante la Administración Nacional de Patentes. También, se quejó por la competencia desleal e incluso denunció que en la Expo Pymes 2010, Petroil presentó y expuso como propio el servicio en discusión. La empresa hasta publicó con fotografía en un diario de amplia circulación, aduciendo que había obtenido el patentamiento del equipo, pero tras una intimación, debió hacer una fe de erratas.
La patente le fue denegada a la empresa
En enero de 2013, el INPI en su web oficial denegó la solicitud de
Petroil de patentar el equipo; por eso, la Cámara consideró probado que
Campanello era el único titular de la patente.
Según la pericia del ingeniero Rodolfo Gómez, jefe del Departamento de Mecánica de la Universidad Nacional de la Patagonia “San Juan Bosco”, que comparó los equipos del inventor y de la empresa, “ambos sistemas se basan en el mismo principio de funcionamiento” que, “sin considerar el medio o la forma de transporte que se use para trasladar el dispositivo, consiste en los dos casos de un pistón”; por eso, “se infiere que se infringe la patente del señor Carlos Campanello”.
También, declaró un técnico mecánico y consultor de calidad, quien refirió que en 2002 fue contratado por la firma Caliper, del demandante, donde ya existían los primeros esbozos del equipo. Petroil lo habría comenzado a usar desde 2007, “existiendo dos versiones del aparato con pequeñas mejoras que no alcanzan a ser una versión nueva”.
“Enriquecimiento indebido”
Campanello reclamó que, desde que pidió la patente para proteger su derecho hasta que la obtuvo, pasaron seis años. En ese lapso “Petroil no mostró disconformidad ni oposición alguna, enriqueciéndose indebidamente a través de la explotación de un equipo falsificado”.
Ante las evidencias, los camaristas opinaron que Petroil debía dejar de usar definitivamente el equipo patentado por el demandante y cualquier otro similar. Según la ley, quien obtiene la patente de un invento gana el derecho exclusivo de impedir que otros, sin su consentimiento, fabriquen, usen, vendan o importen el producto.
El hecho de que Petroil haya pedido la patente y se la hayan negado “resuelve el conflicto de manera permanente y definitiva, estableciendo ese acto administrativo los alcances del derecho del actor, por lo que deberá la demandada cesar en el uso del equipo patentado por el accionante”, reza el fallo
Empresas como YPF y Enap Sipetrol son algunas de las que usaron el servicio de Petroil, pero quedaron fuera de la demanda porque se limitaron a licitar y contratar el equipo y no lo usaron de mala fe; por el contrario, Petroil fue considerada responsable por la tecnología que empleara para la provisión del servicio”.
Según la pericia del ingeniero Rodolfo Gómez, jefe del Departamento de Mecánica de la Universidad Nacional de la Patagonia “San Juan Bosco”, que comparó los equipos del inventor y de la empresa, “ambos sistemas se basan en el mismo principio de funcionamiento” que, “sin considerar el medio o la forma de transporte que se use para trasladar el dispositivo, consiste en los dos casos de un pistón”; por eso, “se infiere que se infringe la patente del señor Carlos Campanello”.
También, declaró un técnico mecánico y consultor de calidad, quien refirió que en 2002 fue contratado por la firma Caliper, del demandante, donde ya existían los primeros esbozos del equipo. Petroil lo habría comenzado a usar desde 2007, “existiendo dos versiones del aparato con pequeñas mejoras que no alcanzan a ser una versión nueva”.
“Enriquecimiento indebido”
Campanello reclamó que, desde que pidió la patente para proteger su derecho hasta que la obtuvo, pasaron seis años. En ese lapso “Petroil no mostró disconformidad ni oposición alguna, enriqueciéndose indebidamente a través de la explotación de un equipo falsificado”.
Ante las evidencias, los camaristas opinaron que Petroil debía dejar de usar definitivamente el equipo patentado por el demandante y cualquier otro similar. Según la ley, quien obtiene la patente de un invento gana el derecho exclusivo de impedir que otros, sin su consentimiento, fabriquen, usen, vendan o importen el producto.
El hecho de que Petroil haya pedido la patente y se la hayan negado “resuelve el conflicto de manera permanente y definitiva, estableciendo ese acto administrativo los alcances del derecho del actor, por lo que deberá la demandada cesar en el uso del equipo patentado por el accionante”, reza el fallo
Empresas como YPF y Enap Sipetrol son algunas de las que usaron el servicio de Petroil, pero quedaron fuera de la demanda porque se limitaron a licitar y contratar el equipo y no lo usaron de mala fe; por el contrario, Petroil fue considerada responsable por la tecnología que empleara para la provisión del servicio”.
En Comodoro se abrieron 300 causas durante la feria judicial
En los primeros trece días de enero, las estadísticas muestran que se
realizaron 71 audiencias de distintas etapas del proceso. En menos de
quince días, ingresó un total de 300 causas a la Oficina Única del
Ministerio Publico Fiscal. “El clima de violencia y malestar social, se
vio intensificado y en crecimiento, durante los últimos meses del año
2016 y los primeros días de enero”, indicaron desde el MPF, agregando
que “según los registros de la parte acusadora, en los últimos dos
meses, actuaron en la investigación de seis asesinatos y dos tentativas
de homicidio, en esa circunscripción judicial”, a la vez que “también se
registró un importante número de denuncias por casos de violencia
familiar y amenazas”.
Asimismo, “la profusa actividad del Ministerio Publico Fiscal, se vio reflejada en las respuestas judiciales, vinculadas a la dieciséis actuaciones de vistas de ejecución realizadas; desde el primer día del año, representantes de la parte acusadora, abogados defensores y jueces, tomaron intervención en 27 audiencias de control de la detención y formalización de la investigación”, agregaron.
Por otra parte, mencionaron que “se desarrollaron 15 audiencias de ejecución, 7 rebeldías y 8 revisiones de medidas de coerción” y que “también, se concretaron otras 13 audiencias de control, por diversas motivos judiciales”, concluyendo que “la creciente espiral de casos de violencia familiar y de género, que atraviesa a la sociedad argentina, tampoco detiene su ascenso en el verano; fueron 38 los casos ingresados desde el primer día del año hasta la fecha”.
Asimismo, “la profusa actividad del Ministerio Publico Fiscal, se vio reflejada en las respuestas judiciales, vinculadas a la dieciséis actuaciones de vistas de ejecución realizadas; desde el primer día del año, representantes de la parte acusadora, abogados defensores y jueces, tomaron intervención en 27 audiencias de control de la detención y formalización de la investigación”, agregaron.
Por otra parte, mencionaron que “se desarrollaron 15 audiencias de ejecución, 7 rebeldías y 8 revisiones de medidas de coerción” y que “también, se concretaron otras 13 audiencias de control, por diversas motivos judiciales”, concluyendo que “la creciente espiral de casos de violencia familiar y de género, que atraviesa a la sociedad argentina, tampoco detiene su ascenso en el verano; fueron 38 los casos ingresados desde el primer día del año hasta la fecha”.