eldiario.es.- Waymo, la empresa fabricante del coche de conducción automática propiedad de Alphabet
—matriz de Google—, denunció este jueves a Uber argumentando que la
empresa de transporte privado ha cometido un “robo planificado” de su
tecnología para los coches de conducción automática.
Esta denuncia es el golpe más reciente que ha recibido Uber, que todavía se está recuperando de la campaña viral #DeleteUber, que logró que esta semana se anunciara una “investigación urgente” sobre las acusaciones de acoso sexual en la empresa .
La denuncia, impuesta en la corte del distrito de San Francisco,
Estados Unidos, se basa en la acusación de que un exempleado de Waymo,
Anthony Levandowski, conspiró para robar secretos comerciales y
tecnológicos de Waymo antes de renunciar con el objetivo de fundar su
propia empresa de camiones de conducción automática, Otto. Uber compró
Otto en agosto de 2016, según consta, por 642 millones de euros .
En el núcleo de la denuncia está el sistema LiDAR, patentado por Waymo,
que funciona como los “ojos” que utiliza el coche sin conductor para
ver e identificar otros vehículos, la carretera y los peatones. Waymo
afirma que pasó siete años e invirtió mucho dinero para desarrollar
LiDAR y alega que los recientes avances de Uber en su tecnología de
vehículos sin conductor se deben al robo del diseño de LiDAR.
“
La configuración y las especificaciones de nuestros sensores LiDAR son
únicos y son propiedad de Waymo”, publicó la empresa en su blog . “Apropiarse indebidamente de esta tecnología es equivalente a robar la receta secreta de una empresa de refrescos".
“
Nos tomamos las acusaciones contra empleados de Otto y Uber muy en
serio e investigaremos este tema con mucho cuidado”, declaró un portavoz
de Uber .
La denuncia de Waymo sugiere que la empresa tiene pruebas contundentes
del robo de propiedad intelectual supuestamente realizado por Otto.
Levandowski descargó 9.7 gigas de “información interna de Waymo que es
secreta, sensible e importante” desde un servidor de la empresa y antes
de renunciar. La información incluía especificaciones de los tableros de
circuito de LiDAR, según la denuncia. Más tarde, alega la empresa, el
empleado intentó borrar sus “huellas de identificación” vaciando su
portátil de trabajo.
Además, la denuncia afirma que Levandowski se reunió con ejecutivos de
Uber en enero de 2016, mientras todavía trabajaba en Waymo y tan solo un
día antes de fundar la empresa que luego se convirtió en Otto.
Otro empleado de Waymo que abandonó la empresa para trabajar en Otto
también descargó información confidencial de Waymo antes de renunciar,
afirma el expediente.
Aunque Waymo ya estaba “muy preocupada” por el hecho de que Uber estaba
adquiriendo Otto, la empresa recibió una sorpresa el 13 de diciembre de
2016, cuando llegó a Waymo un correo electrónico de un proveedor de
componentes para LiDAR cuyo destinatario era en realidad Otto.
El correo incluía un dibujo del tablero de circuito del LiDAR de Otto,
que según Waymo tiene “un parecido impresionante y comparte muchas
características” con el diseño secreto de Waymo.
El expediente detalla los esfuerzos que hace Waymo para proteger sus
secretos, como comprar los componentes de LiDAR a numerosos proveedores y
realizar el montaje dentro de la empresa para evitar que un solo
proveedor tenga información completa sobre la tecnología.
Waymo obtuvo más pruebas a través de un pedido de información pública
en Nevada, donde Otto había presentado documentos para las agencias
reguladoras. Los documentos, que incluían una descripción del sistema
LiDAR de Otto, fueron “la última pieza del puzzle”, afirma la denuncia.
Además de una compensación económica, Waymo busca obtener un
requerimiento para recuperar la propiedad intelectual. “La conducta de
los acusados constituye una infracción de carácter continuo para la que
Waymo no tiene un recurso adecuado en la ley”, señala la denuncia.
Mark Terry, abogado especializado en propiedad intelectual, dice que
marcharse de una empresa con conocimientos y habilidades adquiridas es
aceptable, pero llevarse documentos es otra historia. “Si es verdad que
el acusado hizo esto, es bastante grave”.
“
No entiendo cómo el acusado pensó que podría salirse con la suya,
especialmente hoy en día que toda la información se guarda y todo queda
registrado", aseguró Terry.
Las disputas por cuestiones de propiedad intelectual no son inusuales en Silicon Valley. En enero, Tesla presentó una denuncia
contra el ex director de su programa semiautomático Autopilot,
alegando que también había robado información patentada antes de lanzar
su propia línea de vehículos sin conductor.
Pero la denuncia de Waymo llega en medio de una avalancha de malas noticias para Uber, una empresa qu e parece que se está ganando la fama de chico malo .
A principios de febrero, más de 200.000 usuarios de Uber al parecer borraron sus cuentas en medio del escándalo por los vínculos del director ejecutivo, Travis Kalanick, con Donald Trump y la débil reacción de la empresa ante el veto migratorio contra siete países de mayoría musulmana.
Este domingo, una antigua ingeniera de Uber escribió en su blog detalles de la cultura del acoso sexual
y discriminación de la empresa. Uber respondió encargando al ex fiscal
general Eric Holder y a Arianna Huffington, miembro de la junta
directiva, que investiguen el ambiente de trabajo de la empresa.
En diciembre, la empresa de servicios de transporte privado retrocedió después de una notoria confrontación con los reguladores estatales de California
por sus vehículos sin conductor. La empresa lanzó un programa piloto
con sus vehículos autónomos en San Francisco sin obtener antes el
permiso del departamento de vehículos motorizados.
En su momento, Levandowski declaró que el desafío de la empresa a las normas estatales era “ una importante cuestión de principios". Después de que el estado revocara los registros de los vehículos, Uber admitió la derrota y trasladó el programa piloto a Arizona.
Desde su fundación, Uber ha recaudado más de 10.370 millones de euros de inversores
, incluyendo 243 millones de euros de Google Ventures, el brazo de
nuevos emprendimientos de Alphabet. Waymo aludió a esta relación en su
blog, escribiendo: “Nuestra matriz, Alphabet, ha colaborado con Uber en
muchas áreas, así que esta decisión no se ha tomado a la ligera”.
Terry, abogado especializado en propiedad intelectual, sugiere que
incluso si Uber se ve obligado a pagar una alta suma de dinero como
compensación a Waymo, probablemente el beneficio de haber obtenido esa
información haya valido la pena.
“
Su I+D ha dado un salto importante”, indica. “Han sacado una importante
ventaja. No me sorprendería que previamente hayan hecho un estudio de
costo-beneficio”.
Traducido por Lucía Balducci