ippropatents.- La Oficina Europea de Patentes (OEP) está considerando propuestas para
eliminar los contratos de trabajo permanentes para todo el personal
nuevo a favor de contratos renovables de cinco años a plazo fijo.
Actualmente no hay opciones de empleo alternativas enumeradas en la propuesta, lo que afectará a la incorporación del personal después del 1 de enero de 2018.
Según la propuesta, que establece planes para la "modernización del marco de empleo de la OEP", estas reformas garantizarían la "sostenibilidad a largo plazo" de la oficina y permitirían una gestión más "flexible de la fuerza de trabajo de la EPO".
En una nota interna, el Sindicato del Personal de la Oficina Europea de Patentes (SUEPO) describió el movimiento como "Kafkaesque".
El presidente saliente de la OEP, Benoît Battistelli, presentó la propuesta junto con la directora de recursos humanos de la OEP, Elodie Bergot, en la reunión del Comité de Presupuesto y Finanzas el 24 de octubre.
SUEPO reveló que la propuesta recibió críticas del comité de presupuesto y finanzas, particularmente de representantes de Italia, el Reino Unido, Polonia y Alemania.
Según SUEPO, Battistelli discrepó con las críticas e intimó que "era su prerrogativa gobernar hasta el último día de su mandato".
Se cree que Battistelli argumentó que la propuesta no tenía "implicaciones financieras" y, por lo tanto, era libre de llevarla al consejo administrativo en diciembre sin el consentimiento del comité de presupuesto y finanzas.
SUEPO dijo que existe un "serio riesgo de que este plan explote".
Los contratos de duración determinada actualmente solo se utilizan en el EPO para cubrir la escasez temporal de personal y tienen un tope del 5 por ciento del total de la fuerza de trabajo.
SUEPO explicó que la propuesta planteaba muchas preguntas, particularmente sobre cómo la EPO minimizará la corrupción cuando se niegue al personal los beneficios que conlleva el empleo permanente.
La nota decía: "No habrá orgullo profesional, ningún incentivo para invertir en calidad, ningún estímulo para vincular al empleado con el EPO y mantenerlo leal e inmune a la tentación".
"Con un futuro precario, habrá la tentación de arder la mayor cantidad de efectivo posible para la vida posterior a la EPO. Algunos lo harán honorablemente, otros quizás menos. Los empleados tienen acceso a secretos industriales confidenciales y altamente confidenciales por valor de cientos de millones de euros ".
El sindicato también expresó su preocupación sobre cómo un estatus de empleo temporal afectaría a las familias y cónyuges de los miembros del personal entrante, que probablemente dejarían sus trabajos para reubicarse.
Una fuente cercana a SUEPO dijo que ni el comité central del personal, ni SUEPO en sí fueron informados o consultados sobre la política, ni se les dio la oportunidad de dar su opinión.
SUEPO destacó su esperanza de que el nuevo presidente de la OEP, António Campinos, "podría estar más abierto a abordar los problemas de forma constructiva en lugar de dogmáticamente".
"Una cosa es segura, Campinos encontrará un legado problemático que sin duda obstaculizará el progreso: un limón exprimido no produce mucho".
Campinos ha dicho previamente que buscará continuar la cooperación entre el EPO y la Union Syndicale Fédérale cuando asuma sus funciones en 2018.
SUEPO dijo que lo que Campinos realmente hará es aún tema de discusión, "ya que su respuesta es más bien, por decir lo menos, muy vaga".
La EPO ha sido contactada para hacer comentarios, pero aún debe responder.
