cincodias.- El brote de coronavirus de Wuhan despuntó hace menos de dos meses
como una cepa, nunca antes vista, de esta familia de virus. Ante la
novedad, quedaba todo por conocer, incluida una cura para los
infectados, más de 20.000 en 25 países.
Gilead Sciences, una
biofarmacéutica estadounidense, se ha colocado a la cabeza en la carrera
por encontrar un tratamiento efectivo. El antiviral, llamado
remdesivir, ha sido efectivo en pruebas con humanos. Ahora, China
ha solicitado una patente para aplicarlo y contener los efectos de la
epidemia, que ha causado la muerte de al menos 490 personas.
El Instituto de Virología de Wuhan, la ciudad epicentro del brote,
solicitó la patente el martes, según indicó este organismo, que depende
de la Academia de Ciencias de China. A la solicitud se sumó el Instituto
de Medicina Militar. Ambos destacaron en una publicación en la revista
científica Nature's Cell Research que el remdesivir y la cloroquina, un fármaco para tratar la malaria, son dos vías para inhibir el coronavirus.
Gilead, el artífice del antiviral, trabaja para desarrollar
soluciones para enfermedades mortales. La biofarmacéutica ha anunciado
el envío de suficientes dosis para tratar a 500 pacientes que serán
aplicadas en hospitales de China. Las acciones de la compañía han
avanzado en tres sesiones (del viernes al martes) un 6,65% tras
conocerse la efectividad del fármaco.
Un estudio publicado la semana pasada en New England Journal of
Medicine asegura que un paciente que dio positivo por coronavirus en
Estados Unidos mejoró después de tomar dosis del retroviral, también
utilizado para infecciones como el ébola. Sky News ha asegurado
este miércoles que investigadores del Imperial College de Londres han
logrado "avances significativos" para desarrollar una vacuna. Y en China
los medios han deslizado que técnicos de la Universidad de Zhejiang han encontrado un tratamiento eficaz.
La Organización Mundial de la Salud ha salido al paso de estas
informaciones: "No hay una terapia efectiva contra el 2019-nCoV", ha
asegurado el portavoz de la OMS. El director ejecutivo de la OMS, Mike Ryan, lo ha confirmado horas después.
La agencia estatal de noticias Xinhua asegura que este jueves 761 pacientes recibirán el tratamiento de Gilead. Los infectados que recibirán remdesivir
se encuentran ingresados en el Hospital Jinyintan de Wuhan, ciudad
donde surgió el brote de coronavirus, en un mercado de animales de esta
localidad.
China descarta la licencia obligatoria
En caso de que se conceda la patente, Gilead deberá convencer a los
propietarios chinos de patentes de que sea la empresa la que
comercialice el medicamento para tratar el coronavirus fuera de las
fronteras chinas. Wang Yanyu, miembro de la firma de abogados AllBright
Law Offices citado por Bloomberg, explica que "cuando Gilead quiera
vender el medicamento a otros países, deberá negociar con China por ser
el país que poseerá la patente para ese uso específico".
Sin embargo, el propio Instituto de Virología de Wuhan aseguró en un
comunicado que no ejercerá los derechos que le corresponderían por tener
la patente en caso de que empresas farmacéuticas extranjeras tiendan la
mano al país asiático para cooperar en la contención del virus.
La decisión de cursar una petición de patente y no invocar la
licencia obligatoria no es causal. La guerra comercial entre China y
Estados Unidos hunde sus raíces en una disputa tecnológica y en la que
la Administración Trump
acusa a China de vulnerar los derechos de propiedad intelectual. Las
autoridades chinas no han empleado la vía de la licencia obligatoria a
la que tienen derecho por tratarse de una emergencia nacional. Esta vía
implica una suspensión temporal del derecho de exclusividad del titular
sobre una patente, permitiendo la producción, uso, venta o importación
del producto patentado, por un tercero, sin necesidad de su
consentimiento. A cambio se remunera al titular por los derechos de
uso.
El Centro Nacional de Biotecnología investiga estos días un
medicamento capaz de contener y curar la infección del coronavirus en
humanos. Por el momento, y gracias a experiencias de otros virus de esta
familia (SARS o MERS) ha permitido al CNB crear una herramienta que
consiste en crear virus debilitado que, en modelos animales, confiere
inmunidad contra la infección.
China concentra el 99% de las muertes por la infección y se ha
movilizado para encontrar por sus propios medios un medicamento
efectivo. De acuerdo con Reuters, técnicos de la Universidad de Zhejiang
han encontrado un tratamiento eficaz. Reino Unido también se ha
incorporado a la carrera para encontrar un tratamiento. Según Sky News,
investigadores del Imperial College de Londres han logrado "avances
significativos" para desarrollar una vacuna contra el coronavirus.