sábado, 6 de marzo de 2021

OMC no suspende por tiempo limitado patentes de vacunas

 


La Organización Mundial del Comercio (OMC) no consiguió ayer un acuerdo para suspender por un tiempo limitado las patentes que protegen las vacunas y otras tecnologías relacionadas con el COVID-19.

 

Los gobiernos de la India y Sudáfrica presentaron una propuesta en ese sentido el pasado noviembre con el fin de incitar la transferencia de ese conocimiento -en poder de las compañías que han desarrollado las vacunas, los test de diagnósticos y otros insumos- a productores en países en desarrollo.

Esto permitiría incrementar significativamente la capacidad de producción, que actualmente no puede cubrir la demanda mundial particularmente en el caso de las vacunas, aunque últimamente también se registra escasez de insumos indispensables para el funcionamiento de algunas plataformas de test de COVID en varios países de bajos ingresos.

Adicionalmente, ampliar los sitios de producción de vacunas y de otros productos abarataría los costes.

Los países en desarrollo han apoyado de forma masiva la iniciativa indo-sudafricana, que en las primeras discusiones realizadas en diciembre y enero fueron criticadas por un grupo de países vinculados con la gran industria farmacéutica, que alegaban que pasar por alto las patentes era perjudicial para la innovación.

La decisión en la OMC ha sido que el asunto siga bajo análisis en su Comité dedicado a asuntos de propiedad intelectual y comercio, sin fijar ningún plazo para tomar una decisión definitiva.

Ello a pesar de que en sus intervenciones todos los países estuvieron de acuerdo en que es necesario garantizar un acceso amplio a las vacunas contra el COVID-19.

Ningún país, ni siquiera aquellos que antes se habían posicionado en contra, se atrevió a rechazar públicamente la propuesta en vista de lo sensible del asunto y utilizaron el argumento de que es necesario reflexionar acerca de si levantar temporalmente las restricciones que imponen las patentes es el enfoque adecuado para luchar contra la pandemia.

En la misma línea, varios países occidentales dijeron que sería conveniente escuchar la posición de la industria farmacéutica, por ser la que tiene la información más detallada sobre las proyecciones de producción de las vacunas.

La Federación Internacional de Productores Farmacéuticos ha transmitido su pesar por la situación, por la oposición a la posibilidad de que sus productos sean copiados en otros países.

Más vacunas

En tanto, la nueva directora general de la OMC, la economista nigeriana Ngozi Okanjo-Iweala, dijo ayer lunes que el organismo comercial necesita trabajar con las empresas para abrir más plantas de producción de vacunas contra el COVID-19 en los países en desarrollo.

“La gente está muriendo en los países pobres”, dijo Ngozi en un discurso ante los 164 miembros de la OMC, durante una reunión en su primer día en el cargo.

“Debemos concentrarnos en trabajar con las empresas para abrir y otorgar licencias a plantas de producción más viables ahora en mercados emergentes y países en desarrollo”, dijo, y agregó que también se requieren transferencias tecnológicas.

La nueva directora general de la OMC, que fue presidenta de la Alianza para las Vacunas (Gavi) hasta el año pasado, pidió “dar prioridad a la acción relativa al COVID-19”, en un contexto de desacuerdo por la propuesta indio-sudafricana de liberar las patentes.

El Grupo de Ottawa, que reúne a la UE y a 12 países, entre ellos Brasil, Canadá y Suiza, pedirá por su parte que los países se comprometan, durante la pandemia, a no obstaculizar el comercio médico y supriman los aranceles a los bienes considerados esenciales.

La directora de la OMC también indicó que su otra prioridad será “terminar las negociaciones sobre las subvenciones a la pesca antes de mediados de año”.