sábado, 9 de marzo de 2024

Las farmacéuticas perderán 6.000 millones al año por el fin de patentes hasta 2028

 


 

Lidia Ramírez.-La industria farmacéutica se enfrenta en los próximos años a una cantidad muy elevada de reducción de ingresos por la pérdida de patentes de medicamentos, un plazo tras el cual entran a competir con los genéricos. De esta forma, durante el periodo 2024-2028 las farmas en Europa perderán 30.000 millones –6.000 al año de media– al caducar la protección de numerosos medicamentos de gran éxito

Así se desprende del último informe de la consultora Iqvia The Global Use of Medicines 2024: Outlook to 2028, en el que analiza las pérdidas de patentes de medicamentos en Alemania, Francia, Italia, España y Reino Unido.

El mayor impacto se verá en 2023, 2025 y 2026 con la expiración de la patente de Lucentis en 2022 (aprobado en 2006 para la degeneración macular húmeda relacionada con la edad, este fármaco de Novartis alcanzó ventas de 1.000 millones de euros en 2020), Stelera en 2025 (el medicamento más vendido de J&J desde 2019, con ventas que alcanzaron los 9.723 millones en 2022) y Eylea en 2026 (un medicamento oftalmológico de Bayer que obtuvo ventas por valor de 3.231 millones en 2023). De esta forma, el pronóstico de Iqvia es que la industria farmacéutica deje de ingresar un 4,4% menos en 2024, -8,1% en 2025, -8,7% en 2026, -6,5% en 2027 y -4,4% en 2028. 

Impulso a los biosimilares

Por su parte, Iqvia también estima en su informe que más de la mitad del impacto tendrá lugar en laboratorios de medicamentos biológicos (con una reducción de ingresos de 16.000 millones). Esto conllevará a la compra de biosimilares (biológicos genéricos), siendo el mercado de Europa de este tipo de fármacos el más grande del mundo, con el primer biosimiliar lanzado en 2006.

En Europa ya hay 77 biosimilares autorizados por la Comisión. Y según el informe The impact of Biosimilar Competition in Europe, también de Iqvia,  la Unión Europea empleó 8.040 millones de euros en la compra de biológicos genéricos en 2022. Además, atualmente  se están desarrollando biosimilares del 27% de los biológicos que presentan un alto valor comercial de alrededor de 500 millones. Y es que estos fármacos suponen un ahorro importante para las arcas de los estados. En líneas generales, para los biosimilares, la Comisión fija un precio un 20-30% inferior al del biológico original.

De esta forma, según un informe de la OCU, el tratamiento de un paciente con el biológico Humira tiene un coste anual de 10.794 euros, sin embargo, con sus respectivos biosimilares la diferencia media es de 1.704,1 euros menos. Igual ocurre con los biológicos Remicade (9.009,5 euros por tratamiento) y Enbrel (8.791,6 euros), frente a sus respectivos biosimilares (-1.441,51 y – 549,6 euros de media, respectivamente).

175 nuevos lanzamientos

Así las cosas, se espera que el gasto en medicamentos en Europa aumente en 70.000 millones en los próximos cinco años, frente a los 65.000 del último lustro, con las nuevas marcas como mayores impulsoras de crecimiento.

La consultora estima que entre 2024 y 2028 tendrán lugar 175 nuevos lanzamientos, unos 35-40 por año, en Alemania, Francia, Italia, España y Reino Unido. Estos nuevos productos se esperan que aporten en su conjunto 50.000 millones al gasto en nuevas marcas, unos 9.000 millones al año de media (8.000 millones en 2024, 11.000 en 2025, 12.000 en 2026, 10.000 en 2027 y 9.000 en 2028).

Además, se prevé que un tercio de estos nuevos medicamentos sean tratamientos contra el cáncer y grupos importantes en neurología, incluidas enfermedades raras, aunque los acuerdos de reembolso, sobre todo en medicamentos para enfermedades raras, pueden ser complejos debido al impacto presupuestario para relativamente pocos pacientes beneficiarios, hace hincapié el informe, que también estima que las nuevas terapias para el alzheimer y la ansiedad impulsen el crecimiento del gasto en neurología y salud mental.