La Tercera.com.-Observatorio Sudamericano de Patentes
Mientras las autoridades de comercio de los 12 países que buscan
formar parte del Acuerdo Transpacífico, más conocido como TPP por su
sigla en inglés, alistan sus maletas para la reunión que sostendrán en
Guam (Oceanía), en Chile los diputados convocaron a una sesión especial
para conocer los alcances que tendría el tratado ante el hermetismo de
las negociaciones.
La protección a la propiedad intelectual, las patentes, acceso a
medicamentos, internet y el mundo digital, fueron los tópicos que
concitaron las inquietudes de los legisladores, quienes pidieron al
canciller, Heraldo Muñoz, detallar los beneficios y, eventualmente,
abstenerse en avanzar si no es favorable para el país.
Junto con reconocer estas “líneas rojas en la negociación”, Muñoz fue
enfático en señalar que “no vamos a ir mas allá del estándar vigente en
nuestro país” y aseguró que no se abrirán ni asumirán más compromisos
que los ya adquiridos en los Tratados de Libre Comercio (TLC), que el
país ha suscrito en materia de propiedad intelectual, patentes y
servicios.
En cuanto a los productos y patentes farmacéuticas, el canciller
recalcó que si bien Estados Unidos ha planteado que la protección en
este ámbito para los productos biológicos sea de 12 años, ese plazo “no
es aceptable para Chile”, precisó. “Se lo hemos dicho y si no hay un
acuerdo que sea aceptable, no vamos a firmar. Estamos dispuestos
mantener los cinco años que ya tenemos con EE.UU.”, precisó.
Asimismo, planteó que respecto de la certificación que impulsa el
país del Norte sobre el cumplimiento de la normativa, ellos podrán tener
sus sistemas internos, “pero no aceptaremos ninguna intromisión en
nuestra soberanía y si fuera así, el acuerdo no entra en vigor”.
Beneficios
Sobre los beneficios, el canciller destacó que se han hecho tres
estudios con simulaciones que arrojan que con el TPP habría un impacto
de 1% en el Producto Interno Bruto y entre 1% y 3% en las exportaciones
en el mediano plazo.
Además, habrían mejoras en el acceso a mercado, se verían
beneficiadas las exportaciones chilenas hacia Japón, Malasia y Canadá,
que son importantes mercados para el sector agrícola y el forestal.
También se tendría acceso a compras públicas con diversos países y en
materia de insumos, aún proviniendo de los socios comerciales serían
vistos como propios, lo que permitiría elaborar bienes en Chile, creando
más empleo y atrayendo inversiones.
Dado lo anterior, Heraldo Muñoz pidió un voto de confianza. “Es un
proceso de negociación en curso. Tenemos clara nuestra soberanía y la
protección de nuestros intereses”, señaló.
Al término del encuentro se rechazó un proyecto de acuerdo que pedía a
la Presidenta informar públicamente las ventajas del mismo.