expansion.com.- La falta de ratificación por parte de Reino Unido y Alemania podría
implicar que el sistema creado por la Oficina de Patentes Europea no
entre en vigor en 2016, tal y como estaba previsto.
Los países europeos llevan años trabajando en la creación de una
patente única europea que facilite y aligere los trámites de registro,
abarate los costes y aporte una mayor seguridad jurídica al sistema. El
primer gran paso se dio cuando 25 de los 28 países de la Unión Europea
(UE) apoyaron la creación de este nuevo sistema y firmaron el Acuerdo
sobre un Tribunal Unificado de Patentes en 2013. Sin embargo, la
ratificación de este texto por parte de los estados y la aceptación de
la jurisdicción de esta corte está retrasando su entrada en vigor.
Aunque el presidente de la Oficina Europea de Patentes (OEP), Benoît
Battistelli, se muestre optimista y asegure que la primera patente única
europea se registrará en 2016, otros datos parecen indicar que la
puesta en funcionamiento de este sistema se podría volver a retrasar, ya
que Reino Unido y sobre todo Alemania están aplazando la ratificación
del tratado.
La dificultad a la que se enfrenta ahora mismo la OEP es que 13
países, entre los que deben estar obligatoriamente Francia, Reino Unido y
Alemania, tienen que adherirse al sistema del tribunal de patentes y,
por ahora, sólo lo han hecho siete (Austria, Bélgica, Dinamarca,
Francia, Luxemburgo, Malta y Suecia).
"Nuestro objetivo era 2016, pero quizá los reparos de última hora de
Alemania aplacen su entrada en vigor", apunta Jeremy Philpott, jefe del
departamento de comunicación de la OEP. Según explica, el país germano
ha ralentizado sus avances y ahora se mueve con pies de plomo. De hecho,
Alemania ha rebajado el ritmo de cambios legislativos necesarios para
aceptar la jurisdicción del tribunal unificado de patentes y esto hace
pensar que no va a ratificar rápidamente este tratado. "Aunque logremos
que 20 países revaliden el acuerdo, nada arrancará sin Alemania, y esto
podría convertirse en un serio problema", añade.
En cuanto a Reino Unido, Philpott asegura que el Ejecutivo de David
Cameron sigue trabajando en la dirección correcta y podría ratificar
definitivamente el acuerdo antes de que finalice 2015. Sin embargo, el
plan de referéndum sobre la pertenencia del país a la UE presentado por
el primer ministro británico ha creado cierto revuelo en la OEP, pero
Battistelli afirma que los británicos le habría comunicado que, en el
hipotético caso de salir de la UE, Reino Unido no se plantearía no
formar parte de esta patente única europea.
Otro país que ha mostrado reticencia desde el principio ha sido
Polonia que, junto a Italia y España, no ha firmado el acuerdo de la
OEP. Su problema no es tanto la creación de la patente única europea,
como la aparición de esta nueva corte unificada de patentes que se
establecerá al margen de la legislación comunitaria y que sacará de los
tribunales nacionales los conflictos generados por la patente europea.
De hecho, ni el parlamento de este país ni el sector directamente
relacionado con el registro de patentes a nivel nacional entienden la
conveniencia real de crear este tribunal, puesto que a su entender
generaría una clara pérdida de poder.
En cuanto a los otros dos países no firmantes, Philpott asegura que
Italia, que inicialmente se alió con España ante las protestas por
discriminación lingüística, ha dado un giro de 180 grados tras la última
decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que
asegura que la obligación de presentar la patente única en inglés,
francés o alemán no implica ningún tipo de exclusión y pronto dará los
pasos necesarios para firmar el acuerdo y, seguramente, ratificarlo.
Para terminar, desde la OEP afirman que el futuro de España dentro
del sistema de patente única es una verdadera incógnita y que en este
organismo todavía desconocen cual será el camino que tome después de la
sentencia negativa a sus argumentos del TJUE, aunque esperan que nuestro
país recapacite finalmente para unirse a este nuevo episodio.
Crecimiento histórico
En 2014, la Oficina Europea de Patentes (OEP) marcó un hito histórico
al recibir 274.174 solicitudes de registro de patentes, lo que
significa un incremento de un 3,1% en relación al año anterior, en el
que recibieron 265.918. Los apartados técnicos más importantes fueron
los de las tecnologías médicas, con 11.124 patentes (+3,2%); sector
energético, con 10.944 (+8%); y la comunicación digital, con 10.018
(+6,6%).
En cuanto al origen de solicitud de la patente europea, cerca del 35%
provino de los estados miembros de la OEP y los dos tercios restantes
(65%) de países no europeos. De hecho, en el 'top 5' de los países que
más registros de patentes presentaron el año pasado, sólo encontramos a
un estado de la UE: Alemania, que viene precedido por Estados Unidos y
Japón. Le siguen China y Corea del Sur.
Por último, es necesario hacer hincapié en el nombre de las empresas que
fueron más activas a la hora de solicitar una protección por patente en
Europa el año pasado. En este caso, el podio lo completan Samsung, con
2.541 registros (-10,3% respecto a 2013); Philips, con 2.317 (+26%); y
Siemens, con 2.133 (+8,1%).