domingo, 14 de febrero de 2016

Argentina: denuncian hackeo interno de correos electrónicos en oficina de marcas y patentes

 
PIndustrial.- Los correos electrónicos institucionales y privados de los empleados y funcionarios de la oficina argentina de propiedad industrial (INPI), estarían siendo leídos desde el departamento de sistemas del organismo de acuerdo a información proveniente del ministerio de producción de ese país.

Según denunciaron desde la secretaría de industria,-que cuenta con atribuciones superiores a la propia Oficina- una auditoría confidencial realizada por las nuevas autoridades del ministerio arrojó como resultado la existencia de "actividad de hackeo interno" desde la dirección de sistemas del organismo de marcas y patentes.




La fuente del ministerio -quien solicitó mantener su identidad reservada por temor a represalias- informó que tanto correos electrónicos institucionales como personales de gmail, yahoo y hotmail han sido revisados frecuentemente en los equipos informaticos utilizados por empleados, funcionarios y agentes de propiedad industrial que interactuan cotidianamente realizando su tarea habitual en el Instituto. La lectura inapropiada de correspondencia digital incluye a las autoridades del INPI.

Si bien no fue revelado desde cuando se lleva a cabo esta práctica de violación de correos, se supo que esta aberrante actividad de lectura de información que corresponde a la esfera privada de los empleados -castigada penalmente- llevaría varios años.

De los resultados de la auditoría se filtró que los agentes involucrados en el hackeo responden a uno de los sindicatos de empleados que actúan en el organismo en un número considerable y que llevan a cabo prácticas de extosión y chantajes para mantener privilegios y "cajas negras".

Este nuevo episodio se suma a otros que han sido denunciados en el pasado y que involucra a varios empleados de la organización que responden a un entramado de corrupción, control del personal, influencias en las designaciones de jefes y directores y negociados en varias áreas de la oficina de propiedad industrial de Argentina.

Las auditorias llevadas a cabo y ordenadas desde el ministerio de producción incluyen a sectores de administración y compra de insumos cuyos resultados están siendo analizados por las nuevas autoridades que están monitoreando las actividades desarrolladas en la institución, incluyendo nuevos contratos, compras de insumos y nombramientos.

No es la oficina argentina la única en la que se llevan a cabo estas prácticas:  "en la oficina europea de patentes OEP los trabajadores denunciaron la existencia de vigilancia telefónica, keyloggers y cámaras escondidas dentro de la OEP (vigilando incluso a los visitantes no sólo empleados).
La vigilancia llegó a tal punto que "Nadie se atreve a hablar por teléfono, nadie se atreve a enviar un correo electrónico," dijo la fuente en La Haya, y agregó que el personal a veces se apiña en los baños para hablar con franqueza".