Patnews,Buenos Aires.- el presidente del Instituto Nacional de la Propiedad Industrial, el abogado Dámaso Pardo, es el blanco en la solicitud de renuncia de las cámaras de la industria farmacéutica nacional, luego de haber firmado una controvertida resolución que abre paso a la aprobación de patentes de productos medicinales pertenecientes a empresas extranjeras.
La renuncia de Pardo, es pedida porque firmó en solitario una resolución administrativa con la que pretende otorgar miles de solicitudes de patentes como pago del lobby de las farmacéuticas estadounidenses y europeas que constituyen el 85% de todas las solicitudes presentadas en el INPI.
La renuncia de Pardo, es pedida porque firmó en solitario una resolución administrativa con la que pretende otorgar miles de solicitudes de patentes como pago del lobby de las farmacéuticas estadounidenses y europeas que constituyen el 85% de todas las solicitudes presentadas en el INPI.
Pardo, ex socio de Jose Alfredo Martínez de Hoz (h) y especialista en propiedad industrial en el estudio PAGBAM, desde el 2000, asumió su cargo en el INPI pocos días después de desligarse de sus acciones societarias en ese estudio de abogados, lobbista de empresas transnacionales en el país.
Las cámaras de medicamentos nacionales CILFA, COOPERALA y CAPGEN hicieron saber su inconformidad a las autoridades del gobierno argentino y en los pasillos del ministerio de producción no se descartaba un posible desplazamiento del cargo para descomprimir una situación de gran tensión producida por el propio Dámaso Pardo, quien afirmaba que la resolución 56/16 sería la solución a todos los problemas que habría encontrado a su llegada al INPI, como la poca concesión de patentes farmacéuticas y biotecnológicas, a solicitud de las empresas extranjeras.
Las cámaras argentinas afirman que otorgar estas patentes en el campo de los fármacos ocasionará un fuerte impacto en el mercado nacional de medicamentos de alrededor de 4.800 millones de dólares y que esta resolución amenaza la subsistencia de las empresas que dan trabajo a miles de personas. Sostienen que esta resolución es violatorio de 6 leyes, transfiere soberanía a otras oficinas al momento de conceder patentes presentadas en el territotio argentino y provoca un aumento generalizado de precios en los medicamentos.
El presidente del INPI tiene los días contados, aseguran en Argentina.