miércoles, 31 de enero de 2018

Sexta ronda de negociaciones de TLCAN avanza "muy despacio" con asuntos esenciales en disputa

 media

Xinhua - La recientemente concluida sexta ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) logró algunos avances en el nuevo capítulo sobre la lucha contra corrupción.

Sin embargo, se mantienen las fricciones comerciales entre Estados Unidos y Canadá, lo que representa un gran desafío para el futuro de las negociaciones del TLCAN entre EEUU, Canadá y México.
Durante una conferencia de prensa conjunta después de las negociaciones que tuvieron lugar el lunes, los representantes de las tres partes reconocieron que se han logrado algunos avances, pero que los retos complicados aún están por delante.
El secretario de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo Villareal, mostró un tono positivo al decir que se alcanzaron avances sobre temas de lucha contra corrupción, telecomunicaciones y facilitación comercial entre otros, a pesar de los "desafíos sustanciales" para las futuras negociaciones del TLCAN.
"Para la próxima ronda, todavía tenemos desafíos sustanciales por solucionar. Ya que los avances logrados hasta ahora nos ponen en el camino correcto de crear zonas de aterrizaje para concluir pronto las negociaciones", señaló.
Sin embargo, permanecen algunas discrepancias entre Washington y Ottawa. Antes de la última ronda de negociaciones, Canadá presentó el mes pasado una denuncia comercial en el Centro de Comercio Mundial al reclamar que las malas conductas de EEUU han afectado no sólo a Canadá, sino también a muchos otros socios comerciales como China, la India, Brasil y la Unión Europea. Las conductas incluyen los aranceles antidumping y anti-subsidios adoptados por EEUU.
"Los canadienses no toman el libre comercio como un juego de suma cero en el que una parte debe perder para que la otra gane", indicó la ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Chrystia Freeland, durante la conferencia de prensa.
El representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, calificó la denuncia comercial como algo "sin precedentes" y un "ataque masivo contra todas las leyes comerciales".
Durante los diálogos, Canadá también formuló dos propuestas para abordar las disputas comerciales con Estados Unidos, incluida una de reglas de origen del sector automotriz, dirigida a satisfacer la demanda estadounidense de elevar el porcentaje de piezas producidas en los tres países del actual 62,5 por ciento al 85 por ciento y de garantizar más de un 50 por ciento de piezas producidas en Estados Unidos.
Sin embargo, Lighthizer rechazó la propuesta canadiense de extender la gama de piezas producidas de los tres países e incluir la propiedad intelectual y nuevas tecnologías, tales como los vehículos eléctricos y los autónomos, explicando que "así conduciría a un menor contenido regional del que tenemos ahora, a menos empleos en Estados Unidos, Canadá y sobre todo en México".
Por su parte, Freeland defendió la propuesta, diciendo que está preocupada por "el desmantelamiento de las cadenas de suministro transfronterizas, que han hecho de nuestra industria automovilística la envidia del mundo".
A pesar de las fricciones y diferencias, las tres naciones esperan lograr más progreso en la próxima rueda de negociaciones.
Al afirmar que las conversaciones avanzan lentamente hacia las prioridades estadounidenses, Lighthizer reconoció que esta rueda de negociación fue "un paso adelante" y Estados Unidos "trabajará duramente" para conseguir "mayores progresos".
La próxima ronda de negociaciones del TLCAN esta previsto que se realice a finales de febrero en México, antes de trasladarse a Estados Unidos.