eldiario.es.- Facebook quiere saber tu nivel de
ingresos por las fotos que subas a la plataforma. La patente para
desarrollar la tecnología ya la tienen, así que la atención se centra
ahora en cuándo empezarán a usarla.
Presentaron la licencia en mayo del
año pasado ante el Registro de Marcas y Patentes de los EEUU, un lugar
con el que ya está familiarizada la compañía estadounidense: en los
últimos seis años, la red social de Mark Zuckerberg ha registrado hasta siete patentes, todas con un cierto toque orwelliano.
No ha sido hasta el pasado jueves que la oficina gubernamental ha
aprobado la patente. "Un sistema online predice las características del
hogar de un usuario; por ejemplo, el tamaño del hogar y la composición
demográfica, basándose en los datos de las imágenes del usuario, por
ejemplo, fotos de perfil, fotos subidas por él y las fotos subidas por
otros usuarios conectados socialmente con este; y los datos escritos en
su perfil que sugieren relaciones entre los individuos que aparecen en
los datos de la imagen del usuario", se puede leer en el registro.
Nadie sabe si Facebook ya está poniendo en práctica la
patente o no, pero el sistema analiza cada fotografía que subamos a la
plataforma. No tiene que ver con las fotos que, por ejemplo, subamos a
Instagram (propiedad de Facebook), sino con las imágenes que se
almacenen directamente en los servidores de la red social. El algoritmo
es capaz de saber cómo de grande es nuestra casa a partir de conocer en
qué barrio vivimos. Gracias a eso, también sabría cuál es el nivel de
ingresos medio de la zona.
Incluso, el algoritmo
también será capaz de saber la distribución de nuestro hogar,
reconociendo y diferenciando entre el mobiliario y los objetos que
tengamos por casa. Es una información jugosa para los anunciantes, ya
que de esta forma pueden trazar un perfil bastante aproximado de los
miembros de una familia. Si sabes cuánto ganan, dónde viven, cómo es su
casa y qué hay en ella, entonces, puedes venderles exactamente lo que
necesitan o prever qué es lo que necesitarán en el futuro. No es 1984, sino 2018.