Agencias.-Varias compañías líderes de la industria farmacéutica de EEUU han sido demandadas por conspirar para 'inflar' en hasta un 1.000% los precios de más de cien medicamentos utilizados para el tratamiento contra el VIH, el colesterol, el asma, así como antidepresivos, entre otros.
La demanda fue presentada la semana pasada por 44 estados ante la
Justicia de Connecticut, cuya Fiscalía está al frente de la
investigación que involucra a más de una decena de laboratorios, como
Teva, Pfizer, Novartis y Mylan, detalla el diario The New York Times.
"Todos sabemos que los medicamentos recetados pueden ser costosos",
explicó el fiscal general de Nueva Jersey, Gurbir Grewal, quien, no
obstante, asegura que lograron comprobar que "los altos precios" fueron
"impulsados en parte por una conspiración ilegal entre las compañías de
medicamentos genéricos para inflar sus precios", que acabó
convirtiéndose en una de las "más notorias y perjudiciales de la
historia de EEUU".
Según las primeras averiguaciones, la mayor parte de este acuerdo se
registró entre julio de 2013 y enero de 2015, tiempo en el que la
empresa israelí Teva subió los costos de casi 400 fórmulas para 112
drogas genéricas.
En ese sentido, la demanda expresa que "en lugar de entrar a un mercado
particular de drogas genéricas compitiendo por el precio para ganar
participación", las compañías se pusieron de acuerdo para "dividir a los
clientes para crear un equilibrio artificial en el mercado y mantener
precios altos de forma anticompetitiva".
Además, los fiscales aseguraron que la maniobra perjudicó a la economía
nacional al dañar los planes de salud estatales y los programas
federales.
Las respuestas
Ante las acusaciones, Teva respondió que "revisa la cuestión
internamente" y que "no ha participado en ninguna conducta que pudiera
llevar a una responsabilidad civil o criminal", detalló.
"La compañía ofrece medicamentos de alta calidad a pacientes de todo el
mundo y se compromete a cumplir con todas las leyes y regulaciones
aplicables al hacerlo", agregó Kelley Dougherty, vicepresidente de la
empresa..
En la misma línea, Pfizer negó haber cometido irregularidades y agregó
que Greenstone, su subsidiaria, "ha sido un proveedor fiable de
medicamentos genéricos asequibles durante décadas y tiene la intención
de defenderse enérgicamente contra estas afirmaciones".