“Todos los organismos de ciencia y técnica del país se encuentran en
una situación de crisis. No solo fueron cuatro años perdidos, fueron
cuatro años de un franco retroceso.
El presupuesto para el sector tiene
un desfinanciamiento de entre 800 a 1000 millones de dólares menos en
relación a 2015. Y por otro lado hemos perdido recursos humanos en todos
los organismos. El INTI tiene 700 investigadores menos, el INTA tiene
800, la Comisión de Energía Atómica 1000 menos. En el CONICET lo mismo”
“Si haces el balance y lo comparas, en financiamiento y en recursos
humanos, estamos igual que en 2008,2009. Con lo cual hemos retrocedido
10 años en la materia”
“Con Lino Baraño compartí cuatro años de gestión. De todas maneras
uno conoce al personaje cuando ve toda la película. En el 2015 uno tenía
la visión de él como un buen gestor. Todos sabíamos que tanto Néstor
como Cristina habían hecho una fuerte apuesta política por la ciencia y
la tecnología en el país. Eso es un hecho indiscutible. La continuidad
de Baraño durante el gobierno de Mauricio Macri expresa eso. Sin
embargo, con el mismo entusiasmo con el que armó el sistema se encargó
de desmontarlo, expulsando a sus propios colegas.”
Ciencia y Geopolítica
“En términos geopolíticos, es un fastidio que Argentina le pueda
vender un reactor a Holanda o que salga con un satélite geoestacionario a
ponerse como un competidor en servicios de comunicaciones. Ahí hay una
disputa a nivel internacional con otros países, que son pocos, y donde
Argentina molesta.”
“Cuando pensamos en el próximo ministerio de Ciencia y técnica, uno
imagina un lugar en el que estemos desarrollando la ciencia en pos de la
sociedad. Desde las sociales hasta la ingeniería. Debe ser un lugar
activo, donde se financie y se incentiven proyectos. Que se regenere esa
articulación entre las PYMES, el sector privado y el Estado. Pensar
también las necesidades de la Argentina para su desarrollo y avanzar
hacia allí”.