ADRIÁN MATEOS.- El Gobierno ha abierto la puerta a “revertir” patentes en caso de las compañías, incluidos los laboratorios farmacéuticos, “secuestren ese resultado científico” y no se haga de él un uso social. “Ninguna patente puede quedarse en un cajón”, ha advertido Diana Morant, ministra de Ciencia, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
El departamento que dirige Diana Morant ha incluido esta cláusula en la nueva normativa sobre la creación de empresas de base científica. De esta forma, si una compañía “compra una patente para secuestrar un resultado científico en beneficio propio”, la administración tendría potestad para arrebatársela si considera “que no se le da un uso social”.
Esta medida impacta de lleno en el sector farmacéutico, que engloba cerca del 10 por ciento de todas las solicitudes de patentes en España, según el último informe anual de la Oficina Europea de Patentes (OEP).
Transferencia de conocimiento a empresas
La titular de Ciencia ha avanzado además un nuevo plan de transferencia de conocimiento entre universidades y empresas que estará dotado con 1.200 millones de euros. El objetivo, ha añadido, es el de “no desperdiciar los hallazgos y resultados innovadores que se generan en la sociedad”.
El plan contempla 15 medidas enfocadas a “atajar la tarea pendiente” de la transferencia de conocimientos entre el ámbito académico y las empresas. “Hay que considerar la ciencia como un buen común para la sociedad, no podemos desperdiciar los hallazgos, los resultados científicos que se generan en nuestra sociedad. Es un asunto prioritario”, ha zanjado la ministra.
De forma paralela, Morant ha anunciado la aprobación de “las cinco principales convocatorias para la ciencia en España”. “Vamos a hacer un incremento del 38 por ciento del importe de estas convocatorias hasta los 920 millones de euros a través de la Agencia Estatal de Investigación”, ha recalcado.