RNMA.- Dialogamos con Carla Poth, de la Asamblea Multisectorial de Semillas Libres de Abya Yala, quien nos cuenta acerca del reciente fallo de la Corte Suprema Argentina que convalidó el reconocimiento de patentes sobre las semillas, y de este modo le reconoció derechos de patentes a Bayer Monsanto sobre material vivo, en abierta violación a la Ley de Patentes y de Semillas.
“Se trata del resultado final de un proceso legal que llevó adelante la empresa Bayer Monsanto, con el objetivo de poder patentar un evento transgénico que está dentro de la semilla de soja intacta, que es una semilla modificada en el laboratorio con el objetivo de ser mucho más resistente al uso del agrotóxico glifosato, y que tenga mayor potencialidad en la producción.
Monsanto, en el año 2020, inicio un proceso legal, desconociendo la Ley de Patentes y de Semillas en Argentina, pidió la patente sobre esta secuencia genética (y no sobre la semilla, que está prohibido), y buscando lo que ellos entienden como la mínima característica de esa semilla, planteando que esta secuencia genética podría separarse de la semilla de soja intacta. Bueno, hicieron la presentación legal en 1era Instancia.
El INPI (Instituto Nacional de Propiedad Industrial), que es quien habilita o no la ejecución de este tipo de patentes, apeló el fallo de la Justicia, planteando una serie de regulaciones (como el “patentamiento de la vida”, ya que no se puede considerar a algo vivo como un invento).
La Cámara de Apelaciones ratificó el fallo del juez de 1era instancia, y el INPI volvió a apelar, ahora a la Corte Suprema. Pero, desconociendo la Ley de Semillas, desconociendo la Ley de Patentes, desconociendo todos los mecanismo de implementación de esas leyes en argentina, y claramente desconociendo el requerimiento de la sociedad civil de poder participar en un tema que para la sociedad es absolutamente relevante, porque tiene que ver con los alimentos, la Corte Suprema saca un fallo habilitando el patentamiento de esa secuencia genética”.
“En la última asamblea que hicimos a partir de esta situación, llamamos a estado de alerta porque no sabemos en este contexto económico y político cuándo puede llegar a salir un intento de reforma de ley de semillas”, señala la compañera. “Y empezar a trabajar para el año que viene una asamblea latinoamericana de guardianes y guardianas de semillas, reforzar la comunicación, estar atentos y consolidar espacios que hacen una agricultura alternativa y generan una diversidad biológica de semillas en los territorios, otra forma de producir y alimentarnos”. (Escuchá la nota completa!)