lunes, 30 de abril de 2012

Trabajadores de oficina de patentes de Brasil: “No tenemos nada que celebrar”


 "Día mundial de la propiedad intelectual"

Trabajadores del INPI en huelga durante 2011. Foto: SINTRASEF

“El INPI y la sociedad. Estamos en el camino correcto? Fue el título del trabajo de investigación presentada por la Cámara Brasilera Americana de comercio e Industria (AmCham) que convocó a funcionarios de varios grupos relacionados a la propiedad industrial y la ciencia del Brasil.
La asociación brasilera de la propiedad intelectual (ABPI), la organización mundial de la propiedad intelectual (OMPI), la asociación nacional de investigación y desarrollo de empresas innovadoras (Anpei) y la confederación nacional de la industria (CNI) fueron reunidos para celebrar por primera vez, el día mundial de la propiedad intelectual.

Al entender del encargado de la “Fuerza de Tareas de Propiedad Intelectual” de la cámara estadounidense, João Sanchez, el trabajo de la oficina de marcas y patentes de Brasil es más conocido.
El presidente de la institución, Jorge Ávila, presentó el plan de actualización al 2020, esperando que el INPI se consolidará como líder de la región sudamericana, lo que queda reflejado en el proyecto PROSUR, un sistema de interacción de los examinadores de patentes de sudamérica.
A su vez, la vicedirectora de la oficina de OMPI en Brasil, Beatriz Amorim, afirmó que los principal desafío será el crecimiento de la demanda de patentes que se produce a través del sistema internacional de solicitudes PCT. Esta demanda subió en Brasil por encima de la media mundial (10%) y alcanzo un 17 % durante el año 2011, con solicitudes provenientes de Estados Unidos, Canadá, China, Corea o Japón.

 Jorge Ávila

A pesar de estos datos, especialistas brasileros sostienen que el sistema PCT incrementa la dependencia de la industria local pues el ingreso de patentes del resto del mundo asciende a 15000, lo que genera una situación de colapso de la oficina en poco tiempo, pues no alcanza a procesar los documentos provenientes de esos países.
Los trabajadores del INPI (SINTRASEF) vienen denunciado la extranjerización y la pérdida de soberanía que se está experimentando en la actual administración de Jorge Ávila, quien se está entregando a las trannacionales de Estados Unidos, como lo deuestra el encuentro realizado con AmCham, quien lo sostiene en su cargo a través de las empresas y la embajada estadounidenses.
“EL INPI de Brasil sigue las políticas de los organismo internacionales”, dijeron los trabajadores en el día mundial de la propiedad intelectual. “Nosotros no tenemos nada que celebrar”, afirmaron.
Los trabajadores denunciaron además varias situaciones de asedio y persecución laboral en el sector dedicado al procesamiento de solicitudes de patentes mediante el PCT, pues quedó a cargo de trabajadores tecerizados que responden a laboratorios extranjeros y fueron nombrados por Avila, acusado por diputados brasileros de no defender los intereses de laboratorios nacionales. 
Los trabajadores ya realizaron a finales del año pasado una huelga de 48 hs reclamando por igualdad de salarios con otros trabajadores del estado brasileño y acusaron a Avila de arrendar un edificio nuevo por 19.5 millones de Reales al año, una flagrante contradicción, dijeron.