Autoridades de propiedad Industria de 9 países de Suramérica en Chile. Foto: OSP
La Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y las Oficinas de propiedad Industrial de 9 países de Suramérica avanzan en regionalizar el sistema de patentes a la medida de empresas de Estados Unidos, Unión Europea y Japón
Las oficinas de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Surinam y Uruguay conformaron PROSUR “Sistema de Cooperación Regional en Propiedad Industrial”, para conectar sus bases de datos a través de una plataforma desarrollada por la propia OMPI y armonizar así el estudio y concesión de las patentes de las empresas transnacionales en la región.
El proyecto está sospechado de favorecer las patentes de empresas farmacéuticas y biotecnológicas que conforman más de la mitad de las patentes tramitadas en las oficinas nacionales. Se trata asimismo de un avance por sobre los tratados ya firmados por los países cooperantes en el marco de los Acuerdos sobre Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (TRIPS-ADPICS) en la década del 90.
Del acta filtrada por la oficina brasilera en 2011 se revela que no solo el objetivo es compartir información en materia de patentes, sino extender el proyecto incorporando a las Marcas de las empresas y construyendo una plataforma de administración y decisiones sobre el otorgamiento de derechos exclusivos monopólico a empresas extranjeras, tanto farmacéuticas como biotecnológicas e incluyendo otros campos de la tecnología.
El proyecto PROSUR liderado por las oficinas de Argentina y Brasil, ha sido denunciado por especialistas de la región como un paso a contramano de las políticas antineoliberales llevadas a cabo por los gobiernos progresistas.
Asimismo, se revelaron las intensiones del gobierno del Partido Popular de España en colocar el tema de la propiedad intelectual como uno de los principales durante la XXII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno a llevarse a cabo en Cádiz, en noviembre próximo, coincidiendo con el aniversario 200 de la firma de la Constitución española de 1812.
En los últimos años el lobby farmacéutico y biotecnológico de los Estados Unidos ha estado monitoreando y realizando un trabajo de control sobre algunas oficinas de marcas y patentes de Suramérica que no participan de este proyecto, como Venezuela y Bolivia, sin embargo PROSUR continúa su avance y está siendo propagandizado por con un video que induce a pensar en los aspectos de cooperación entre oficinas, pero omite referirse a los reales beneficiarios que OMPI y el BID pretenden favorecer: las empresas de EE UU, Unién Europea y Japón que representan el 90 % de las patentes presentadas en la región.
Vea el Video