El "Protocolo de Madrid" es un tratado internacional creado hace 30
años que facilita y reduce costos para el registro de marcas de empresas
en el exterior y Brasil oficializó su integración el martes con la
rúbrica que plasmó Bolsonaro antes de partir a Japón, donde participará
en la Cumbre del G-20, según un comunicado divulgado este miércoles por
la Cancillería.
Los efectos jurídicos del Protocolo a nivel internacional se
producirán 90 días después de que el documento de adhesión sea
registrado ante la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual
(OMPI), con sede en Ginebra.
Con la adhesión al acuerdo, los empresarios brasileños podrán
registrar sus marcas en 102 países signatarios (responsables de más del
80 % del comercio internacional), presentando documentación únicamente
en Brasil, ante el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI),
lo que reducirá costos y simplificará significativamente los procesos
burocráticos para este trámite.
Según cálculos de la Confederación Nacional de la Industria (CNI),
con la adhesión de Brasil al Protocolo los plazos de análisis y los
costos de registro pueden ser un 75 % menores que los actuales, ya que
en este momento un trámite puede durar hasta cuatro años en el país, por
lo que muchos empresarios preferían hacerlo directamente en el
exterior.
Cuando el Protocolo fue aprobado por el Congreso brasileño, en mayo
pasado, el director de Desarrollo Industrial de la CNI, Carlos Abijaodi,
apuntó que la adhesión dará más seguridad a las empresas, que pasan a
tener más garantías en cuanto a la inversión y el esfuerzo que están
haciendo para registrar la marca en el país, divulgar y alcanzar otros
mercados.
