martes, 29 de abril de 2014

OMPI propicia el debate sobre patentes de semillas y transgénicos en Cuba


 

Monsanto intenta por todos los medios introducir sus productos en todo el Mundo y utiliza a instituciones internacionales aliadas para lograr sus propósitos: con la colaboración de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) y Organizado por la Oficina Cubana de la Propiedad Industrial (OCPI) junto al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) se desarrolló el V Congreso de Propiedad Industrial en La Habana del 28 al 30 de abril.

Según informó Félix Bell Rodríguez, subdirector de la OCPI, entre los propósitos esenciales de trabajo para el año 2014 están la difusión de las invenciones del país ya patentadas y continuar la actualización de la legislación cubana para las invenciones y modalidades afines.

El funcionario se refirió a las disposiciones vigentes desde inicios de 2012 cuando entraron en vigor los decretos- ley 290, 291 y 292, referidos a Invenciones, Dibujos y Modelos Industriales; Protección de Variedades Vegetales y a Esquemas de Trazado de Circuitos Integrados, adaptados a los acuerdos de la OMC.

En todo este proceso de ordenamiento legal, y ante la necesidad de mantener las variedades vegetales de todos los géneros y especies a resguardo, OCPI realiza junto al Minagri (Ministerio de la Agricultura), un proceso de examen y registro de estas en toda su diversidad, con análisis de campo bien abarcador (el programa de protección ya incluye alrededor de 20), en respuesta a la urgencia de incrementar la producción de alimentos.

En el programa de actividades se describen los puntos específicos a tratar sobre la materia:
  • El Convenio de Diversidad Biológica (UPOV), el Protocolo de Nagoya y la propiedad industrial.
  • El cambio climático y la propiedad industrial.
  • Estrategias nacionales de propiedad industrial.
  • Uso de diversos tipos de semillas: seguridad alimentaria, perspectiva desde el sistema sui generis de protección de las variedades vegetales.

Entre las personalidades que participan en el cónclave se encuentran Oswaldo Gironés, Consejero de la Oficina Regional para América Latina y el Caribe de la OMPI y Alejandro Roca Campaña, director principal de la División de Acceso al Conocimiento y la Información, del Sector de Infraestructura Global, de ese mismo organismo. - See more at: http://www.cubacontemporanea.com/noticias/sesiona-en-la-habana-v-congreso-de-propiedad-industrial#sthash.pI68qJ7d.dpuf
Entre los funcionarios que participan en el cónclave se encuentran Oswaldo Gironés, Consejero de la Oficina Regional para América Latina y el Caribe de la OMPI y Alejandro Roca Campaña, director principal de la División de Acceso al Conocimiento y la Información, del Sector de Infraestructura Global, de ese mismo organismo.

Uno de los principales exponentes del V Congreso de Propiedad Industrial es el argentino, Raimundo Lavignolle, presidente del Instituto Nacional de la Semillas (INASE) quien promueve una ley de semillas denominada "Ley Monsanto" que está despertando serias controversias entre los agricultores nacionales, pues favorece abiertamente a los monopolios transgénicos y perjudica a los pequeños agricultores quienes deberán pagar por la propiedad intelectual de las semillas.

En Argentina, la filtración del contenido del borrador develó que la nueva ley de semillas obligará a los agricultores a:

a) “Adquirir las semillas de soja con tecnología RR2Bt las personas jurídicas y o físicas que hallan optado por este sistema (acuerdo privado) y lo cumplan”.
b) “Comercializar el grano obtenido con aquellos exportadores o elevadores participantes del Sistema”.
c) “Utilizar las tecnologías RR2Bt o georeferenciar conjuntamente con Monsanto, los exportadores y elevadores del sistema los lotes del productor durante la siembra de la soja y las semillas a comercialización”.
d) “Pagar la tecnología en el momento de comprar la bolsa, al declarar el uso propio para la siembra o al comercializar el grano en el punto de entrega”. De no haberse abonado la regalía correspondiente con anterioridad al momento de entrega de los granos al exportador/elevador participante del sistema, el monto adeudado en tal concepto será percibido por dicho participante y remitido al proveedor.

Las modificaciones a la ley convalida una extensión de la propiedad intelectual mas allá de la función del evento en la semilla en sí mismo, extendiéndose al control sobre la comercialización de lo producido violando la Ley de patentes argentina que declara no patentables a las variedades vegetales, plantas y semillas. Mediante la nueva ley se deroga además el uso propio gratuito de semillas.

Syngenta, Dow Agrosciences y Nidera declararon  acuerdos de investigación con Monsanto para desarrollar a toda velocidad variedades RR2Bt que estarán en el mercado en cuanto se autorice su comercialización y se apruebe la ley.

El UPOV se aprobó en París en 1961 y revisada varias veces hasta su actual redacción de 1991. Según la el sitio web, tiene como misión "proporcionar y fomentar un sistema eficaz para la protección de las variedades vegetales con miras al desarrollo de obtenciones vegetales en beneficio de la sociedad". Los "obtentores vegetales" no son otra cosa que empresas multinacionales dedicadas a crear semillas transgénicas y protegerlas mediante un "derecho de obtentor". Entre los motivos para esta protección intelectual están:

a) El fitomejoramiento que demora y es costoso.

b) Las nuevas variedades transgénicas se multiplican más rápido y fácil.

c) Los obtentores necesitan protección para recuperar su inversión.

Si bien en Cuba no se ha dado aún el debate sobre transgénicos, la presencia del funcionario argentino especialista en registro de semillas híbridas y transgénicas e invitado de OMPI, sugiere que esta organización está relalizando junto con Monsanto, una exploración sobre la factibilidad de aumentar la producción de granos en la isla a través de semillas que reconozcan la propiedad intelectual de su propietario.