Por consalud
La industria farmacéutica es uno de los pilares de la salud pública global. Su papel en la investigación, desarrollo y distribución de tratamientos salva vidas y mejora la calidad de vida de millones de personas. Sin embargo, su estructura económica y dinámica competitiva han dado lugar a un conjunto de prácticas que distorsionan el mercado, limitan la competencia y elevan los precios de los medicamentos, en perjuicio de los pacientes.